Palacio Chino de Torreón (CAPTURA)
A un año de la demolición del emblemático edificio chino que adornaba la calle Donato Guerra en Torreón, justo frente a la Alameda, la red recuerda con cariño lo que representó el mismo y cómo lucía justo antes de ser derribado.
El canal en TikTok de 'Telengarner' se encargó de compartir un video a modo de recuerdo de cómo lucía el viejo Palacio Chino justo antes de ser demolido.
Tal como se muestra en las imágenes, el lugar que alguna vez fue uno de los restaurantes más populares de la región, lucía en completo estado de abandono y completamente lleno de polvo, pero todavía con vestigios de sus mejores años.
Entre las ruinas, los encargados de la exploración urbana consiguieron encontrar viejas botellas de salsas de soya y otras más de bebidas alcohólicas.
También, pese a que el edificio ya estaba cerca de ser demolido, todavía podía apreciarse algunas partes y muebles del restaurante como ventanas, una barra y también baños.
¿Cuál es la historia del Palacio Chino de Torreón?
El 18 de mayo de 1986 un pintoresco restaurante fue inaugurado en el número 25 sur de la calle Donato Guerra, frente a la Alameda Zaragoza, en el Centro de Torreón. El inmueble destacaba por su estilo oriental. Se trataba del Palacio Chino, un negocio impulsado por los empresarios Gilberto Chong y Tomás Chao López, cuyo diseño es obra del arquitecto Sergio Ledesma.
El Palacio Chino rompía con el estilo arquitectónico del lugar. Sergio Ledesma siguió un modelo oriental planteado por los propietarios, el cual tuvo que construir con los medios locales a su alcance. Tenía puertas imponentes, lo habitaba una serie de símbolos tradicionales chinos y sobresalía el empleo de colores como el rojo, el verde y el dorado. También estuvo dotado de salones para banquetes y posadas, donde la sociedad lagunera solía organizar reuniones.
Se trató de un restaurante elegante de comida cantonesa (Cantón es la región de dónde históricamente han sido originarios la mayoría de migrantes chinos desembarcados en México). Su menú, guisado por chefs chinos, incluía platillos como costillas cantonesas, mariscos preparados al estilo oriental o albóndigas de camarón y pescado, entre otros. Era una aventura de sabor, tal como lo indica un anuncio publicado en las páginas de El Siglo de Torreón.
Hoy en día el Palacio Chino no es más que un recuerdo en la memoria de varios laguneros, pues actualmente el lugar donde se ubicaba se encuentra completamente vacío a la espera de ser fincado por alguna nueva y moderna edificación.
