Don Burdo y XDesiertoX han logrado tejer un diálogo entre ambos a través de obras trabajadas con óleo y tinta china. (RAMÓN SOTOMAYOR)
Dos artistas laguneros decidieron unir sus perspectivas a través de la exposición Bosque de huizaches, que desde el pasado jueves y durante dos semanas permanecerá en el espacio El Costurero, al interior de Casa La Morelos.
Se trata de Don Burdo y XDesiertoX, jóvenes que han logrado tejer un diálogo entre ambos a través de obras trabajadas con óleo y tinta china, algunas de ellas intervenidas con fuego, las cuales cuelgan en las paredes de la habitación, mientras una instalación de un garrafón lleno de tierra marca el centro del espacio.
“De alguna forma, lo que quisimos retratar fue justo nuestra interacción. Cuando nosotros nos conocemos, nos damos cuenta de que hay cosas en común que podemos compartir con medios como el dibujo. Entonces, ahí se pueden expandir muchas cosas”, indicó Don Burdo.
Las piezas presentadas abordan la somatización. Por una parte, representan los dolores que Don Burdo presenta en su cuerpo, pero también conviven con los elementos que XDesiertoX extrae de la naturaleza, tal es el caso de las espinas.
“Lo que nos cautivó es que en ambos casos, si él (XDesiertoX) buscan cosas en cuestión de la región y yo con esta cosa de la somatización emocional, coinciden en que son contenido botánico. Entonces, ahí empieza a haber como cierta conversación entre los dos proyectos, entre los dos dibujos, las dos creaciones y se pueden dar este tipo de cosas”, agregó Don Burdo.
Por su parte, XDesiertoX compartió que se trata también de una búsqueda de símbolos, elementos que son arrojados en sus propuestas gráficas, de ahí que la exposición se llame Bosque de huizaches.
“Esto es como la idea de la convivencia. El bosque es el ejemplo de la diversidad entre varios tipos de árboles. Por eso le pusimos el nombre de un árbol emblemático de la región, y pues sí, es la idea de interacción”, reflexionó XDesiertoX.
Según los artistas, la exposición Bosques de huizaches, conformada por nueve pinturas, una instalación y una escultura sonora, estará en el espacio El Costurero durante dos semanas.