El alcalde, Román Alberto Cepeda González sostuvo que los lamentables hechos suscitados a las afueras del TSM el pasado domingo son un caso fortuito que no se debió a la falla o desatención de protocolos, sino a un acto unipersonal, una mala decisión que surgió de lo que ya se verá en los resultados de la investigación.
Detalló que este evento fue la consecuencia de un asunto personal del que la misma investigación arrojará si hubo de por medio el consumo de bebidas alcohólicas, y señaló que, sin dejar de lamentar la pérdida de una vida humana, no es algo que ponga en entredicho la seguridad de Torreón en el futuro.
"Yo creo que hay que calificarlo como lo lamentable que es, pero como un caso fortuito, no un error de seguridad ni de protocolo, no se relajó nadie", dijo al sostener que en todo momento se mantuvo el dispositivo de seguridad, e incluso las porras fueron escoltadas como ocurre al término de cada partido de futbol.
Además, el operativo del Alcoholímetro se ha llevado a cabo de manera constante en los alrededores del mismo estadio.
CÁMARAS DE SEGURIDAD, CONECTADAS
El edil señaló que, incluso, las cámaras de seguridad del TSM son las únicas que están conectadas al centro de comando C2 al interior y exterior, y que su administración invirtió más de cuatro millones de pesos en fibra óptica para generar esa conectividad, después de eventos de agresiones ocurridos en un estadio de otra entidad en el país.
"Es un modelo que se quiere llevar por parte de la liga a todos los estadios del país, porque esto ha funcionado, siempre todo es perfectible, pero es importante dejar claro que los protocolos no fallaron", indicó.
El alcalde de Torreón detalló que este evento fue la consecuencia de un asunto personal.
