Como es tradición a lo largo de casi una década, los participantes realizarán algún tipo de activación. (Archivo)
Con el objetivo cumplido de jugadores inscritos, este viernes se disputa la octava edición del Torneo de Golf Sonrisa Azul, en el campo del Campestre Torreón.
En punto de las 11 de la mañana, se dará el escopetazo de salida por el hoyo correspondiente para cada foursome, quienes debido al interés mostrado, superaron el cupo inicial que era de 36 equipos, para cerrarlo en un total de 40.
Anoche en medio de un gran ambiente de convivencia, se celebró el tradicional rompehielos, acompañado por el Torneo de Putt, frente al área de la terraza.
Para hoy, el sistema de competencia será en el formato a Go Go a 18 hoyos, en equipos integrados por cuatro elementos.
Se premiará a las mejores O'yes en todos los Par 3 (hoyos 4, 7, 12, 15 y 17), así como camioneta y automóvil último modelo, a los primeros Hole in One en el 4 y en otro por designar, respectivamente.
En los hoyos 6, 9 y 16, se realizarán diversas actividades para concientizar a los participantes en el tema del autismo. En pasadas ediciones, en los drivers de salida, uno de los jugadores de cada equipo, lo realizaron arriba de tablas de equilibrio, guantes de carnaza y con un chaleco de peso, así como con audífonos con un volumen elevado.
Para esta ocasión, se designará previamente a un elemento de cada foursome, para enseñar a los niños y jóvenes con dicha condición, a jugar este deporte que demanda concentración, paciencia, práctica y precisión.
Campeones del 2023
En la séptima edición, el equipo conformado por Saad Milán, Emilio Sánchez, Arturo Giacomán y Juan Pablo Ruenes, se quedaron con el título, luego de que firmaron tarjeta de 57 golpes (14 debajo del par de campo), con lo que aseguraron el primer puesto.
Superaron por un par de impactos, al foursome integrado por Juan Pablo Murra, Mauricio Mijares, Toño De Prada Safa y Braulio López. En la tercera posición se ubicaron Pepe Arreola, Alejandro Fernández, el exarquero de Santos Laguna, Jonathan Orozco y Carlos Rojas, quienes terminaron con 60 golpes (-11).
En el hoyo 4, el mejor tiro fue el de Alejandro Fernández Enríquez, al dejar la pelota a una distancia de 2.10 metros, mientras que en el 7, los honores correspondieron a Ricardo Muñoz González con 3 metros y 24 centímetros.
Carlos López Martínez, fue el único que en el hoyo 12, pudo poner la bola arriba de green, utilizando en el golpe de salida, guantes de carnaza. Polo Sotoluján en el 6, fue quien la llegó más lejos dentro del fairway, montado en una tabla de equilibrio.
En el hoyo 15, Moisés Arce Daher la dejó a 75 centímetros, para llevarse un gran premio, superando apenas por cuatro centímetros el golpe de Saad Milán. En el 16, el drive más largo con polainas en los brazos lo consiguió Juan Pablo Ruenes.
Ernesto Dávila puso la pelota a 1.87 metros del hoyo en el 17, para ganar el atractivo premio, de una estancia de más de una semana en República Checa y Austria en vuelo redondo, que luego coronó en el sorteo, al ganarse la pantalla de 65 centímetros.