La cifra adeudada a Coahuila es de más de 190.4 millones de pesos, correspondientes únicamente al año 2023, retenida por Secretaría de Hacienda. (HILDA SEVILLA)
La infraestructura vial en Coahuila, específicamente las carreteras federales 57 y 40, se ha convertido en un tema de preocupación, debido a su deterioro progresivo y sobre todo, por la nula inversión de recursos, a pesar de que ya están etiquetados para enviar al Estado, por lo que son miles de millones de pesos los que el Gobierno Federal adeuda a la entidad.
Desde Piedras Negras hacia Matehuala y de Torreón a Saltillo, estos tramos han sido testigos de un aumento en los accidentes automovilísticos, muchos de ellos fatales; se trata de una omisión que recae directamente sobre el Gobierno Federal.
De acuerdo con Jorge Arturo Valdés Flores, diputado local del Partido Verde, el Gobierno de México no ha enviado los recursos necesarios para ejecutar las obras de rehabilitación y conservación de las carreteras.
La cifra adeudada a Coahuila es de más de 190.4 millones de pesos, correspondientes únicamente al año 2023, y se mantienen retenidos por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), a pesar de que el presupuesto total autorizado para dicho año fue de 237.2 millones de pesos.
De esta suma, sólo se aplicaron 82.8 millones, dejando una deuda sin explicación clara del por qué no se ejecutaron, y según el legislador, fue desde octubre y hasta diciembre cuando se suspendieron por completo los mantenimientos a los tramos carreteros.
Presupuesto para 2024
Para el año 2024, la situación no ha cambiado, ya que el presupuesto asignado de 299.1 millones de pesos, etiquetado para la conservación rutinaria de carreteras, sigue sin ejercerse; no se ha enviado ni un solo peso a la entidad, declaró Valdés Flores.
Desde el Congreso del Estado se presentó el exhorto para solicitar a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) en Coahuila, que dieran información del por qué no se ha enviado esa inversión de millones de pesos a Coahuila, pero la respuesta simple que dieron es que se continúa a la espera de que Hacienda libere los fondos; mientras tanto, el nulo mantenimiento pone en riesgo cada día la seguridad de miles de automovilistas que diariamente transitan por estas vías.Lo anterior, sin tomar en cuenta que el tránsito de personas aumenta hasta más de mil 500 por ciento en época navideña, cuando miles de "paisanos" regresan a México para pasarlas fiestas con sus familias.
El diputado Valdés Flores ha señalado que las condiciones climatológicas de los últimos meses con las fuertes lluvias, han aumentado el deterioro de las carreteras.
La falta de mantenimiento oportuno ha dejado ciertos tramos completamente destrozados, donde ya no es suficiente una simple conservación, sino que se requieren reparaciones profundas. Este retraso en la intervención no sólo afecta la infraestructura, sino que también pone en peligro la vida de los conductores, tanto de vehículos particulares como de transporte comercial y turístico.
"El problema se agrava en épocas de alta afluencia vehicular, como en la temporada navideña. Durante estos periodos, las carreteras de Coahuila, especialmente la 57, son transitadas por miles de "paisanos" que viajan hacia sus lugares de origen o cruzan el estado para dirigirse a otros puntos del país", reiteró el Legislador.
Las vías, que antes ofrecían una ruta segura por sus condiciones cuando se invertía en las rehabilitaciones, se han convertido en un escenario de accidentes constantes debido a su deterioro.
Según Valdés, el Gobierno Federal debería haber destinado también una partida emergente para evitar este tipo de siniestros, pero hasta la fecha, no se ha recibido tal recurso ni en Coahuila ni en otros estados de la República, donde el reclamo es similar a este Estado.
Desde el inicio de la actual legislatura en enero de 2024, Jorge Valdés presentó un punto de acuerdo en el Congreso del Estado para exigir una explicación sobre el destino de los recursos que debieron haberse ejercido en 2023.
Ni un solo peso
Después de meses de insistencia, la respuesta llegó y se dio a conocer que desde el último trimestre del año pasado, no se ha destinado ni un solo peso al mantenimiento de las carreteras federales en Coahuila.
Esta situación ha prolongado la falta de intervención, lo que ha derivado en un deterioro aún mayor de las vías.
Para 2024 y prácticamente al final del año, la Secretaría de Hacienda aún no libera los recursos presupuestados, lo que provoca que las reparaciones necesarias se retrasen indefinidamente.
"Es ilógico que estemos en el último trimestre del año y aún no se haya enviado el recurso para carreteras", lamentó el diputado Valdés.
La urgencia es evidente pues con las lluvias, las carreteras han sufrido aún más daños, elevando considerablemente los costos de reparación.
Otro aspecto preocupante es la disparidad entre los reportes oficiales y la realidad en cuanto a los accidentes viales en las carreteras federales; al respecto, Valdés también solicitó información a la Guardia Nacional sobre los accidentes ocurridos en las carreteras 40 y 57 en los últimos cinco años.
Los números son reveladores: en la carretera 40, los accidentes han fluctuado, pasando de 73 en 2019 a 100 en 2022, con una reducción a 29 en 2024. En la carretera 57, el aumento fue más significativo, alcanzando su pico en 2022 con 166 accidentes, para luego descender a 22 en lo que va de 2024.
Sin embargo, estas cifras no coinciden con los reportes de las dependencias de atención de urgencias ni con lo que se observa en redes sociales, donde se evidencia la frecuencia semanal de accidentes.
Tramos como el de Los Chorros, en Arteaga, y las carreteras libres de Piedras Negras y Saltillo a Torreón, son especialmente peligrosos, registrando el mayor número de siniestros con saldos mortales.
Postura de omisión
A unos días del cambio de administración en la Presidencia de la República, es poco probable que los recursos destinados al mantenimiento de las carreteras federales se ejerzan.
Además, según la ley, los fondos no utilizados en los rubros correspondientes se devuelven a la Federación, haciendo imposible que regresen a las entidades. Esto agrava aún más la situación, pues el deterioro de las vías continúa en aumento mientras el gobierno central mantiene su postura de omisión.
La falta de atención y los retrasos burocráticos han generado una crisis vial en Coahuila, donde las malas condiciones de las carreteras no sólo afectan la infraestructura, sino que cobran vidas.
Ante esta realidad, se demandan una respuesta inmediata para evitar más tragedias en las carreteras federales, concluyó el Diputado Jorge Valdés.
