Chorizo.
Aunque no suele entrar en la canasta básica, el chorizo se ha vuelto un complemento casi obligatorio en muchos hogares de México, pues éste suele prepararse en diversos platillos.
El más común es elaborado a partir de carne de cerdo, aunque también existen variaciones con pollo, pavo y hasta soya y champiñones, además de contener diversos ingredientes que realzan sus sabores.
Ante la necesidad de muchas familias por tener este producto en su canasta básica, son diversas marcas las que ofrecen chorizo en el mercado, pero, no todo es lo que parece y por ello la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) analizó aquellas que no cumplen con lo que prometen en sus etiquetados.
De acuerdo a un estudio publicado en la Revista del Consumidor del mes de junio de este año, Profeco evaluó los niveles de sodio, calorías y grasas saturadas que poseen los chorizos de diversas marcas.
No cumple con su etiquetado y hay exceso de grasas
Según reveló dicho estudio, la marca que menos cumple con su etiquetado es Chata y su edición 'Bicentenario', pues ésta señala en el empaque que posee 215 g de contenido neto, cuando en realidad tiene 203 g y, aunque dice ser de cerdo, posee soya en su composición.
Su variación 'Ranchero', también enfrenta una situación similar, prometiendo una cantidad en su etiquetado que no es la verídica, pues igual que la 'Bicentenario' sólo posee 203 g en vez de 215 g.
Por si no fuera suficiente, la marca Chata también es la que posee más exceso de grasas y calorías a comparación de otras marcas.
Mucho Sodio
Otras marcas que también resaltaron en la revista por su exceso de sodio son Conde de luna argentino y semimaduro, Obertal, Zwan y Parma, además de Chata.
Recuerda que, según expertos, el consumo alto de grasas, calorías y sodio puede ser perjudicial para la salud, por lo que lo recomendable es acercarse a un experto en nutrición para prevenir cualquier anomalía por el consumo de productos como el chorizo.
