Durango, desde su fundación ha superado adversidades

Se cumple un aniversario más de la fundación de la ciudad de Durango y es necesario indagar en la historia, para entender el comportamiento de la sociedad duranguense y cómo ha sido el desarrollo de la ciudad, porque si alguna ciudad ha superado adversidades, es está, por diferentes cuestiones que han impedido su desarrollo, a la par de otras ciudades del norte. 

La adversidad comenzó, desde que nace como capital, ya que el gobernador no residía en la ciudad y se fortaleció, hasta casi 120 años después, cuando regresó la residencia de los gobernadores a Durango, sin embargo, la ciudad se mantuvo.

A pesar de las circunstancias, ha crecido y cuenta prácticamente con todos los servicios de las grandes ciudades, sin los problemas que afectan a las mismas.

FUNDACIÓN

Aunque no había población prehispánica, que era donde usualmente se fundaba una ciudad, se reconoció que era un valle fértil, donde las condiciones se podían aprovechar, para que los colonos permanecieran.

El capitán Francisco de Ibarra, determina el lugar para que pueda fungir como la capital de la Nueva Vizcaya, cerca del pueblo de Analco, un pueblo de indios, fundado años antes, para que le diera servicio a la ciudad.

Se le dieron instrucciones precisas para establecer la capital del reino y así darle formalidad al territorio. Pudo haber fundado la ciudad en San Juan del Río, donde radicaba, pero las ordenanzas eran claras, una vez que se fijará la capital, no podía estar a menos de 25 leguas del límite adiacente, que era la Nueva Galicia.

Alonso de Pacheco, fue el encargado de determinar el lugar, por lo que se establecen de manera inicial 25 colonos, españoles y mestizos, a quienes se les entregó un lote para que construyeran su casa, un solar y tierras para producir y tener sus propios alimentos, así nace la Villa de Durango.

Cuando se trazó la ciudad, al sur, llegaba hasta la calle Pino Suárez, al norte a Calle Negrete, al poniente hasta calle Zaragoza y al oriente, a calle Madero.

La división del pueblo de indios con la ciudad, se llamaba la guardarraya, que correspondía a la Acequia Grande, ahora las Alamedas, así lo precisó el cronista e historiador de la ciudad, Javier Guerrero Romero.

ANIVERSARIO

Al preguntarnos, ¿cuál es la importancia del aniversarios de la fundación?, hay mucho que decir, solo basta hacer un recuento de lo difícil que ha sido que se consolide la ciudad y el fortalecimiento de la identidad.

Desde la fundación de la Villa de Durango, el 8 de julio de 1563, se han registrado epidemias y epidemias graves, aislamiento de la ciudad, asaltos en los caminos, ataques, saqueos e incendios, como la toma de Durango, en 1913.

 Otro de los acontecimientos importantes, fue el estrangulamiento político que le hicieron a la capital, por apoyar el movimiento cristero, en 1920, son hechos que destaca el historiador.

IDENTIDAD

Los duranguenses en general, somos cerrados por la desconfianza, pero cuando se le abre la puerta de la casa a alguien, se le abre en serio y ante cualquier situación o problema, se manifiesta la solidaridad inmediatamente, reconoció el historiador.

“Somos desconfiados frente a lo nuevo, porque hemos vivido cuatro siglos y medio, de ataques permanentes de lo que llega de fuera, pero una vez que quien llega, lo hace para contribuir y ayudar a la comunidad, se le considera uno más de nosotros”.

Los duranguenses han sabido luchar y luchado de frente, contra viento y marea, por eso ahora, es una población preparada para enfrentar situaciones difíciles.

IDENTIDAD Y SÍMBOLOS

Recordar la historia, el pasado, reconocer la ciudad, nos da identidad de que somos parte de una comunidad, de la cual hay que sentirse orgullosos. Ese sentido de pertenencia, es la razón por lo que muchos paisanos regresan a visitar la ciudad, por la que quieren saber que pasa en su tierra.

Cuando alguien se encuentra fuera y ve a alguna imagen que le evoca a Durango, se sienten en casa y con orgullo. Entre los símbolos que reflejan esa identidad, se encuentran algunos edificios históricos, como la Catedral Basílica Menor, el monumento a Francisco Villa, a Guadalupe Victoria, pero también otros elementos como la sierra, el alacrán, un nuevo símbolo que se está consolidando, el mezcal, entre otros.

Un símbolo importante de identidad, que caracteriza a los duranguenses, es el habla, aunque con la tecnología, redes sociales, medios de comunicación y programas, ha disminuido esa diferencia, pero antes, por la forma de hablar se delataba a las personas que eran de Durango.

CRECIMIENTO

 Son principalmente factores de política externa, lo que ha provocado que se retrase el desarrollo, apenas en este siglo o fines del pasado, se desarrolló la conectividad por red carretera.

Ahora, la sociedad y gobierno han buscado una mejor calidad de vida, que sí la hay, en comparación con otras ciudades del mismo tamaño, porque se ha sostenido poco a poco el crecimiento.

 La ciudadanía cuenta con un ejercicio importante de vinculación entre sociedad y gobierno, con diferencias, altibajos y con diversos movimientos políticos, pero al final se han sumado en proyectos para la ciudad, como el impulso que se le ha dado al turismo.

Respecto a las críticas de algunos duranguenses, de que la ciudad se ha quedado estancada y aún consideran que es un rancho, expresó “somos críticos, porque queremos tener una mejor ciudad, que es bueno, pero hay que ser críticos y proactivos y reconocer las cosas positivas que se tienen”.