El último adiós a la diva mexicana Silvia Pinal en el Palacio de Bellas Artes realizado este sábado fue un asunto muy familiar, íntimo y emotivo, a pesar de tratarse de un homenaje nacional con la asistencia de cientos de admiradores.
Después de las 11 de la mañana, la carroza que trasladaba los restos de Silvia Pinal, escoltada por elementos de seguridad, arribó al Palacio de Bellas Artes.
A su llegada, decenas de personas ya se encontraban congregadas a las afueras de Bellas Artes en espera de poder despedirse por última vez de la actriz.
De la mano de su familia, los restos de la primera actriz fueron colocados en el interior de Bellas Artes para comenzar con la ceremonia póstuma en su honor.
Sus hijas, Sylvia Pasquel y Alejandra Guzmán hicieron acto de prsencia junto al féretro de su madre.
Claudia Curiel de Icaza, secretaria de Cultura, fue la encargada de conducir la ceremonia luctuosa en honor a la última diva del Cine de Oro mexicano, recordando la vida y obra de ésta, sus logros y triunfos tanto en el ámbito profesional como personal.
Sylvia Pasquel primera hija de Silvia Pinal, tomó el micrófono y dedicó unas conmovedoras palabras para su fallecida madre, agradeciendo al Palacio de Bellas Artes, los encargados de la Secretaría de Cultura y todos los presentes por acompañarlos para despedir a la legendaria actriz.
"A todos los que nos acompañan el día de hoy (ayer), muchas gracias. Agradezco todas las muestras de cariño, sus palabras. Duele mucho perder, no sólo perder a una gran actriz, sino a mi madre amada con la que compartí mil cosas. Mi hermosa, tierna, simpática y ocurrente bella madre", dijo Pasquel.
Asimismo, Pasquel recordó a Viridiana, difunta hija de Silvia Pinal, señalando que 'ahora podrán reencontrarse'.
"Mi madre es grandiosa. Estuvimos todos juntos cuando ella trascendió en su último suspiro. Algo que siempre voy a tener en mi corazón es que ella nos enseñó que, este matriarcado, siempre ha tenido y tendrá magia, arte. Es lo mejor que nos dejó. Se fue tan en paz, tan tranquila. Ella se merecía descansar. Para mí es la madre más bella. Me enseñó más allá de amar. Gracias por todo, por enseñarnos, por ser eterna", dijo Alejandra Guzmán al tomar la palabra.
Luego de Alejandra Guzmán, Michelle Salas, bisnieta de Pinal, tomó la palabra.
"Hoy estamos aquí para despedir a una mujer que fue un pilar para todos. Fue más que una madre, una abuela, fue una mujer adelantada a su tiempo que luchó por su gremio, por las mujeres, nos demostró cómo romper paradigmas y transformar al mundo. Abuela sé que me miras desde donde estás, sabiendo que cumpliste tu propósito aquí en la Tierra (...) En cada lucha que tomé sé que estarás conmigo y que me estarás viendo desde el cielo. Gracias por amarnos. Descansa en paz abuela", dijo Michelle Salas.
Stephanie Salas, por su parte, recordó cuando ella acudía a lugares públicos como restaurantes con la primera actriz.
"Cuando íbamos a un lugar público, pues siempre le pedían autógrafos o fotos, yo me preguntaba por qué no la dejaban comer, pero yo era muy niña y con el tiempo comprendí que era maravilloso compartirla a ella con todos los que la amaban. Sólo puedo darte las gracias por amarnos. Viva la gran diva, doña Silvia Pinal", dijo Stephanie Salas.
Camila Valero, bisnieta, también compartió unas palabras para Pinal.
"Siempre consideré una gran fortuna tener cuatro generaciones. Yo le preguntaba qué consejos me daba para la carrera y el medio de la actuación y ella me decía 'estudia'. Ella se tomaba en serio su trabajo, con amor y dedicación. Lo que más deseo en esta vida es al menos llegar a los talones a mi bisabuelita. Era una mujer muy generosa. Nunca le negó un autógrafo, una foto, una sonrisa a nadie. Gracias abuelita por estos últimos días que pasé contigo. Nunca voy a olvidar ese último te quiero que nos dijimos. Te adoro abuelita, te voy a llevar siempre en el corazón".
Luego de las emotivas palabras, Linda Saldaña interpretó la canción Alma Mía en honor a Silvia Pinal.
La intérprete María del Sol también pidió un aplauso en honor a Pinal, solicitando además que los presentes se pusieran de pie antes de cantar Nos volveremos a encontrar.
Siendo las 12 del día y con la interpretación de Humberto Craviotto con el tema Júrame, al público se le permitió ingresar al recinto para rendir tributo y despedirse de la primera actriz.
Con flores, rehiletes y otras ofrendas, los asistentes honraron la memoria de Silvia Pinal.
Entre las figuras reconocidas que se observaron en la ceremonia fue Patricia Reyes Espíndola.
LUIS ENRIQUE GUZMÁN Y FRIDA SOFÍA, AUSENTES
El único hijo varón de la diva, y su nieta, Frida Sofía, faltaron al homenaje.
Aunque Alejandra Guzmán confirmó el viernes que gracias a su madre se pudo dar el acercamiento con Frida, la joven, quien sí estaba contemplada para asistir, decidió no hacerlo y rendirle tributo a su abuela a través de sus redes sociales.
Así lo hizo horas después de que se confirmara la muerte de la también conductora, Frida se mostró llorando en un video en el que agradeció haberse podido despedir de su abuelita, quien ayer fue cremada.
De acuerdo con las declaraciones que Efigenia Ramos (quien fuera asistente de Silvia Pinal), dio a la prensa, Frida "no encontró vuelo".
Por su parte, aunque el nombre de Luis Enrique estaba anunciado en el programa oficial del evento, el músico nunca apareció.
Al término del homenaje, el productor y amigo de la familia, Iván Cochegrus confirmó la ausencia de Luis Enrique, y reveló que el hijo de la Pinal se sentía indispuesto, no se sentía bien.
"Está mal, se siente mal, esa es la situación", dijo a las afueras del recinto cultural, donde precisó que ayer en la noche le realizarían un altar a Silvia Pinal en su casa.
No logran despedirse
Alejandra Flores Reyes salió temprano desde su hogar en Nezahualcóyotl, el municipio conurbado de la Ciudad de México, para ver por última vez a Silvia Pinal. Fueron dos horas de camino hasta el Palacio de Bellas Artes.
Cuando la mujer de 68 años llegó a su destino, se encontró con una fila que rondaba las 500 personas, de acuerdo con cálculos extraoficiales y que no avanzaba. El homenaje arrancó cerca de las 11:30 horas, pero dejaron entrar al público hasta el mediodía y, conforme al protocolo, la fila entraba al lobby, pasaba caminando frente al ataúd sin detenerse, para salir por una puerta lateral.
Unos dos minutos duraba el recorrido y apenas unos 10 segundos lo que podían ver del montaje: una gran foto de Pinal en blanco y negro, las sillas donde se encontraban Sylvia Pasquel y Alejandra Guzmán. Pero cuando Doña Alejandra entró, así como otras decenas de personas, ya no pudo ver nada de eso. El ataúd salió del recinto a las 13:00 horas, pese a que este viernes, durante conferencia de prensa, se había afirmado que permanecería el tiempo suficiente para que la gente despidiera a su ídola.