Para mi buen amigo Amador Gándara Mijares, que anda que no lo calienta ni el sol con sus Vaqueros.
Pasan los años y seguimos pensando en lo fascinante que es la NFL, porque cada semana, siempre llega un sobresalto que nos impresiona y ya no sabemos qué va a suceder cada ocho días, porque aquí está el dilema con aquellos que creíamos que algunos equipos iban a tener un día de campo el pasado fin de semana, ya que seis escuadras con registro de 0-2, ya lograron obtener su primera victoria de la temporada y cuatro organizaciones con marca de 2-0, ya perdieron, y tres de ellos sucumbieron por dos dígitos.
Los Delfines, los Patriotas y los pobres Vaqueros, estuvieron entre los ganadores más impresionantes de la patada inicial y desde entonces, tienen a sus aficionados mordiéndose las uñas, y hasta lo vimos con los Santos, que lucieron como el equipo más impresionante de la NFL durante dos semanas, con un promedio de 45.5 puntos por partido, y ahora, perdieron en casa en la tercera semana, anotando sólo 12 unidades.
Los Bucaneros anotaron 57 puntos en sus primeros dos encuentros y sólo anotaron siete en casa el domingo contra los Broncos, que duplicaron su total de puntos de la temporada en la victoria, mientras que los Raiders vencieron al actual MVP Lamar Jackson y a los Cuervos en Baltimore, para luego perder en casa ante Andy Dalton y las Panteras, que no habían ganado hasta entonces.
Y entonces ¿Significa esto que debemos prepararnos para que los Vikingos y los Acereros, que tienen un récord de 3-0, se estrellen contra la pared pronto? No hay forma de saberlo, pero en un año de baja para los quarterbacks en toda la liga, Sam Darnold y Justin Fields han tenido comienzos fantásticos, mientras que, tanto Malik Willis y Dalton acaban de desempeñar el papel de quarterbacks héroes saliendo de la banca, ganando como visitantes, y qué decimos de Jayden Daniels, que el pasado lunes por la noche hasta creíamos que era la imagen de Joe Theisman cuando pusieron a los Bengalíes tras las cuerdas en la temporada.
Y tocando el tema de la escuadra de Dallas, hoy inician esta cuarta semana de esta gala sin precedentes, cuando, en partido de la misma división y que tienen que aprovechar, se enfrentan a los Gigantes en la Gran Manzana, sin embargo y de todos sabido, los últimos dos partidos de la escuadra de la estrella solitaria ha surgido una fórmula inquietante en la que los Vaqueros no pueden detener la carrera y no generan grandes jugadas ofensivas, hasta que están abajo por una gran diferencia.
Mientras que Nueva York, once segundos después del inicio del partido del domingo pasado, ya habían perdido la patada inicial y permitido que Amari Cooper se colara detrás de ellos, preparando una ventaja de 7-0 para los Cafés, pero mostraron una tremenda tenacidad, convirtiendo el rápido déficit en una ventaja de 21-7 en el medio tiempo con el joven Malik Nabers, que estuvo sobresaliente.
Y para esta semana, llama la atención la visita de los Jefes a Los Ángeles para enfrentarse a los Cargadores, donde la gente del coach Jim Harbaugh no puede darse el lujo de perder a Herbert por un período prolongado, por lo que fue una buena noticia que su dolencia en el tobillo resultara ser tan positiva como probablemente podría haber sido. Sin embargo, el detalle es que otros tres jugadores clave abandonaron el juego por lesiones, donde la amenaza Joey Bosa y los tackles ofensivos Rashawn Slater y Joe Alt, los tienen con un suspiro.
¿Y saben qué, mis cuatro lectores? Si yo fuera Robert Saleh, mandaba a la banca a Aaron Rodgers, para que se le quite lo arrogante.