Borne no ha logrado encontrar los consensos necesarios para aprobar las leyes de su gobierno. (RONALD WITTEK / EFE)
Élisabeth Borne presentó este lunes la dimisión como primera ministra francesa, según anunció el Elíseo, mientras que el actual titular de Educación, Gabriel Attal, aparece como favorito para su sucesión.
"Su trabajo al servicio de nuestra nación ha sido cada día ejemplar. Usted ha dirigido nuestro proyecto con el coraje, el compromiso y la determinación de las estadistas. Gracias de todo corazón", afirmó el presidente, Emmanuel Macron, en su cuenta social de X.
Muy impopular en los sondeos, el presidente busca revitalizar su mandato y dar un nuevo aliento a su política año y medio después de su reelección.
Tras 20 meses al frente del Ejecutivo, Borne, la segunda mujer que dirigió un gobierno en Francia, ha pagado el desgaste de un cargo en el que ha afrontado medidas impopulares, como la reforma de las pensiones o la ley de inmigración.
Esta última, aprobada el mes pasado con el respaldo de la derecha conservadora y de la ultraderecha, provocó una fragmentación del partido del presidente Macron, con un enorme descontento de su ala más izquierdista.
Borne no ha logrado encontrar los consensos necesarios para aprobar las leyes de su gobierno, lo que la ha obligado a acudir con frecuencia a un artículo de la Constitución que le permite adoptarlas sin voto de los diputados.
En contrapartida, se ha visto obligada a superar 30 mociones de censura presentadas por la oposición, algunas de ellas ganadas por estrecho margen, como la que superó tras la aprobación de la reforma de las pensiones por tan solo nueve votos.
Ya entonces, su puesto al frente del Gobierno parecía comprometido, pero Macron apostó por mantenerla en el cargo a condición de que supiera encontrar los pactos necesarios para evitar una parálisis del país.
Borne, de 62 años, procedente del Partido Socialista, reputada negociadora, no ha conseguido atraer ni a la oposición de izquierdas ni a la de derechas, una labor que ahora tendrá que afrontar su sucesor.
El Elíseo indicó que la actual primera ministra seguirá tratando los asuntos corrientes hasta su relevo.
El titular de Educación, Gabriel Attal, aparece como el favorito para dirigir el Gobierno, lo que, de confirmarse, lo convertiría a sus 34 años en el más joven primer ministro de la historia de Francia.