La obesidad es una enfermedad crónica que se define por una acumulación excesiva de grasa y que es perjudicial.
Cada dato nuevo en la Jurisdicción Sanitaria No. 6 confirma que la obesidad en La Laguna se está convirtiendo en una epidemia silenciosa que tiene gran repercusión social pues aumenta el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, hipertensión y determinados tipos de cáncer.
En Torreón, Matamoros y Viesca, en lo que va de este año 698 personas de 1 a más de 65 años de edad fueron diagnosticadas con obesidad. Son 440 mujeres y 258 hombres. El coordinador del Programa de Vigilancia Epidemiológica, Humberto Gerardo Flores Muñoz, informó que el rango mayormente afectado es el de 25 a 44 años con 266 casos, seguido del de 50 a 59 años con 95 casos; el de 45 a 49 años con 91 casos y el de 20 a 24 años con 64 casos.
En el rango de los 60 a 64 años, se detectaron 52 casos; en el de 65 y más fueron 40 casos; 27 casos en personas de 15 a 19 años; 24 casos en el de 10 a 14 años; 24 casos de 5 a 9 años y 15 casos en menores de 1 a 4 años.
Por institución de salud, el IMSS Ordinario, notificó 301 casos nuevos de obesidad en este 2024, mientras que 276 diagnósticos se hicieron en el sector de salud privado. En centros de salud y hospitales de la Secretaría de Salud se atendieron a 92 personas con acumulación excesiva de grasa; en el Hospital Militar Regional de la Sedena fueron 16 casos; en el IMSS Bienestar 8 casos y en el ISSSTE se detectaron 5 casos.
La Jurisdicción Sanitaria cerró el año pasado con 2 mil 987 casos nuevos de obesidad, de los cuales, mil 965 correspondieron a mujeres y mil 022 a hombres. En el rango de 25 a 44 años, se detectaron mil 040 casos. En 2022, fueron 3 mil 34 casos de obesidad, de los cuales, mil 150 correspondieron a personas de entre 25 y 44 años.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) señala que la obesidad no es sólo tener unos kilos de más, sino que se trata de un exceso de grasa que puede desencadenar problemas como la diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y hasta aumentar el riesgo de ciertos tipos de cáncer.
Además, la obesidad puede afectar la calidad de vida de una persona, dificultando actividades tan simples como dormir o moverse con facilidad.
Por su parte, la Secretaría de Salud federal dice que está documentado que el consumo excesivo de sodio, azúcares y grasas saturadas o trans, que se encuentran con mayor frecuencia en productos ultraprocesados, está vinculado con el desarrollo de sobrepeso, obesidad, diabetes y enfermedades cardiovasculares, que contribuyen con más de 70 por ciento de las muertes en personas adultas en México.
Las personas pueden reducir su riesgo limitando la cantidad de grasas y azúcares que consumen, aumentando el consumo de frutas, verduras, cereales integrales y frutos secos, y realizando actividad física regularmente.
Etiquetado frontal
La Secretaría de Salud expresó su beneplácito por la decisión del pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN):
* Que determinó la constitucionalidad de las disposiciones sobre el etiquetado frontal de alimentos y bebidas no alcohólicas preenvasados.
* Esto para indicar los productos que exceden los límites de calorías, azúcares, grasas saturadas, sodio y grasas trans, así como las leyendas de edulcorantes y cafeína.
