Entre lágrimas Jimmy Kimmel lamenta la victoria de Donald Trump

En el programa “Jimmy Kimmel Live” del miércoles por la noche, Jimmy Kimmel ofreció una incisiva crítica sobre las elecciones, destacando en su monólogo lo que, en su opinión, se perdió con la reelección de Donald Trump:

 “Fue una noche terrible para mujeres, niños, para los cientos de miles de inmigrantes que trabajan arduamente para hacer que este país funcione, para la salud, el medio ambiente, la ciencia, el periodismo, la justicia y la libertad de expresión. Fue una noche difícil para los pobres, para la clase media, para los ancianos que dependen del Seguro Social, para nuestros aliados en Ucrania, para la OTAN y para la democracia y la decencia. Y fue una mala noche para todos los que votaron contra él. ¿Y adivinen qué? También fue una mala noche para todos los que votaron por él. Aún no se dan cuenta”.

En contraste, “fue una gran noche para Putin, para la polio, para los multimillonarios adorables como Elon Musk, los brotes de Silicon Valley, y para todos los que se retorcieron hasta vender lo que les quedaba de alma para postrarse ante Donald Trump”, agregó.

Kimmel reflexionó sobre cómo la elección se redujo a una opción entre una fiscal y un criminal, “y elegimos al criminal como presidente de los Estados Unidos. Más de la mitad del país votó por el criminal que planea perdonarse a sí mismo por sus delitos. Supongo que esta elección no fue manipulada”.

También recordó cómo Trump había declarado con anticipación que esta elección estaría arreglada.

“¿No es notable que esta vez no hubo fraude? La última vez los demócratas hicieron trampa; esta vez decidimos no hacerlo, ¿no? Este Donald Trump es como el Emperador de ‘Star Wars’: es viejo, es malvado y sigue regresando sin ninguna explicación razonable”.

Kimmel había sido muy explícito en su apoyo a Kamala Harris y en sus advertencias contra votar por Trump, incluso compartiendo un monólogo especial diseñado para republicanos. “Sean sinceros, la semana pasada, ¿enviaron ese monólogo a algún republicano como les pedí?”, bromeó.

Aplaudió a Harris por conceder la derrota con dignidad, algo que Trump se negó a hacer en 2020. “En Estados Unidos, hay una elección, luego cuentan los votos, y si el demócrata pierde, llama para felicitar al ganador”, afirmó.

Kimmel añadió: “Voy a decir algo que Trump nunca diría, a menos que le favoreciera: el pueblo votó, y esta es la elección que hicimos. En enero, Donald Trump será presidente, y eso es todo. No significa que nos rindamos, pero tampoco significa que debemos asaltar el Capitolio porque no nos guste el resultado”.

Aunque le resulta difícil ver el lado positivo de lo ocurrido, Kimmel espera que, tal vez, cuando Trump no cumpla sus promesas, algunos finalmente vean sus verdaderas intenciones. “Ya pasamos por esto antes, y sí, esta vez probablemente será peor, quizás mucho peor. Pero también creo que quizá miremos atrás y nos demos cuenta de que esto era lo que necesitábamos para despertar. Tal vez quienes lo apoyan tanto necesiten descubrir cuánto le importan en realidad”.

Añadió: “Todas esas promesas sobre frenar las guerras, imponer aranceles, cómo va a aplastar la inflación y reducir impuestos, ahora tiene que cumplirlas, y espero que lo haga. Realmente lo espero”. Kimmel cerró su monólogo con una mezcla de esperanza y escepticismo, mencionando que tal vez la única ventaja de todo esto es que Trump no podrá postularse en 2028.

Finalmente, se despidió con un toque humorístico: “Mi única petición para el presidente electo Trump es que me deje compartir celda con Taylor Swift. Soy muy bueno haciendo pulseras y creo que nos llevaríamos bien. Veremos si esto es gracioso en seis meses, cuando comience la gran redada de presentadores de talk shows”.