Estados Unidos festeja el 4 de Julio con parrilladas y fuegos artificiales
Las hamburguesas no son lo único que se va a asar este 4 de julio: millones de personas en Estados Unidos se encuentran bajo alertas de calor mientras grandes cantidades de estadounidenses emprendieron viajes para celebrar el nacimiento de su nación con desfiles, parrilladas y fuegos artificiales al anochecer.
Había expectativa de que se impusieran récords de viaje, mientras la gente abarrotaba los aeropuertos y las autopistas antes del 4 de julio para llegar a sus destinos. En el oeste, mientras tanto, los residentes se enfrentaban a un calor sofocante, ya que el Servicio Meteorológico Nacional advirtió de una ola de calor “significativa y extremadamente peligrosa” en gran parte de la región.
Los fuegos artificiales —un elemento esencial de la festividad— probablemente alcanzarán un máximo histórico, con un número incalculable de espectáculos en patios traseros, además de 16.000 espectáculos profesionales que iluminarían el horizonte de mar a mar.
“Así es como celebramos. Son las bombas estallando en el aire. Es el resplandor rojo de los cohetes. Así es como la gente muestra su orgullo y patriotismo”, dijo Julie Heckman, de la Asociación Estadounidense de Pirotecnia.
Todo apuntaba a que se iban a llevar a cabo grandes celebraciones: La Administración de Seguridad en el Transporte reportó que un récord de casi 3 millones de personas viajaron por los aeropuertos del país en un solo día la semana pasada, y que se prevé que esa cifra sea superada esta semana. Y la Asociación Automovilística Estadounidense (AAA) proyectó que 60,6 millones de personas viajarán en auto durante la festividad. Parte de este impulso se atribuyó a una menor inflación, aunque muchos estadounidenses siguen preocupados por la economía del país.
Mientras tanto, en gran parte de la costa oeste, se aconsejó a los residentes que tomaran precauciones para evitar el sobrecalentamiento durante la festividad.
De acuerdo con los pronósticos, las temperaturas alcanzarán los 38 grados Celsius (100 grados Fahrenheit) en la costa y en el interior de California, y el calor se propagará hasta la costa noroeste del país. Algunas zonas en el desierto del suroeste de la nación podrían registrar hasta 49 C (120 F). También se pronosticaban condiciones calurosas y sofocantes para el sureste y la región del Atlántico Medio.
En la ciudad de Oroville, en el norte de California, el tradicional espectáculo anual de fuegos artificiales fue cancelado debido a que alrededor de 26.000 residentes seguían desplazados por el creciente incendio Thompson, mientras que cientos de bomberos bajo un calor abrasador luchaban por contener las llamas para evitar que alcanzaran más viviendas.
Desde Maine hasta Hawai, había suficientes parrilladas, postres, bebidas frías y barras y estrellas. Pero los estadounidenses también estaban celebrando de otras formas propias de sus comunidades.
En la costa rocosa de Down East, en Maine, algunos planeaban disfrutar de carreras de barcos langosteros. En Filadelfia, los descendientes de los firmantes de la Declaración de Independencia hacían sonar 13 veces la Campana de la Libertad, una por cada una de las colonias originales. Las comunidades californianas de Bolinas y Stinson Beach, al norte de San Francisco, participaban en su concurso anual de tirar la cuerda en el que los perdedores acaban en una laguna.
Y, por supuesto, está el concurso anual de comer hot dogs en Coney Island, Nueva York.
El feriado por el Día de la Independencia generalmente une a los estadounidenses en su amor compartido por la patria, pero la versión de 2024 se celebra en un contexto de profunda polarización política y una contienda presidencial divisiva.
En Boston, donde se esperaba que miles de personas asistieran al espectáculo de fuegos artificiales de la orquesta Boston Pops, el maestro Keith Lockhart dijo que es inspirador ver a personas de distintas tendencias políticas reunidas en la explanada del río Charles. Pero señaló que “habría que tener la cabeza muy metida en la arena para no darse cuenta de las profundas divisiones de nuestro país”.
“Es, de hecho, un momento peligroso”, escribió en un correo electrónico antes del espectáculo. “Si, aunque sólo sea por un día, podemos dejar a un lado nuestras diferencias y abrazar nuestros puntos en común, tiene que ser algo positivo”.