Martha Granados, de 78 años. (CORTESÍA)
La familia de Martha Granados, la colombiana desaparecida en mayo de 2023 en Ramos Arizpe, desmintió las declaraciones del Fiscal de Personas Desaparecidas en Coahuila, José Ángel Herrera, quien recientemente afirmó que la búsqueda de la mujer se había suspendido debido a que la Fiscalía General de la República (FGR) había atraído el caso.
Según la familia, esto no es cierto y aseguran que ambas fiscalías, la estatal y la federal, pueden seguir trabajando de manera paralela.
El pasado 14 de mayo, Martha Granados, de 78 años, fue vista por última vez en un rancho ubicado en Ramos Arizpe. Ella y su esposo se encontraban en el lugar para capacitar al personal, y luego regresaron al casco del rancho, debido a que se sentía cansada, no se volvió a saber de ella.
Desde entonces, las labores de búsqueda han sido irregulares, afirmó la familia, además de presentar omisiones.
José Ángel Herrera afirmó que la FGR había tomado el control del caso, lo que impedía a la Fiscalía de Coahuila continuar con las diligencias.
"Estamos sujetos a las instrucciones de la FGR, ya que tienen asegurado el predio donde desapareció la señora Granados, lo que impide que sigamos trabajando", declaró el fiscal; sin embargo, Juan Pablo Castelblanco, hijo de la desaparecida, contradijo estas afirmaciones y aseguró que no existe ningún impedimento legal para que la Fiscalía Estatal continúe la búsqueda.
“La FGR abrió su propia carpeta de investigación, pero eso no significa que haya atraído el caso. Ambas investigaciones son independientes y la Fiscalía del Estado puede seguir trabajando en el caso de mi mamá sin problema”, aseguró Juan Pablo.
Además, señaló que la supuesta espera de instrucciones por parte de la FGR es una excusa para no continuar con la investigación.
Castelblanco también detalló que el predio donde desapareció su madre tiene un área de 700 hectáreas, pero que solo un pequeño espacio de aproximadamente 200 metros cuadrados, que incluye un jardín y una casa, está asegurado por la FGR.
"Eso no impide que la Fiscalía de Personas Desaparecidas trabaje en esta zona del rancho, mientras no rompan los sellos de aseguramiento", subrayó.
La familia ha expresado su frustración ante lo que consideran una falta de profesionalismo por parte de la Fiscalía Estatal. Desde el inicio, señalaron irregularidades en el manejo de la investigación, como aparentes falsos testimonios, omisiones en los procedimientos y falta de seguimiento en la búsqueda de personas de interés, en particular del personal que trabajaba en el rancho el día de la desaparición de Martha Granados.
Según Juan Pablo, las autoridades estatales descartaron la zona asegurada por la FGR como sitio de interés, afirmando que no había indicios de delito, y dieron explicaciones que calificó como absurdas, como la posibilidad de que su madre hubiera sido arrastrada por un río o atacada por un animal salvaje.
"Desde diciembre notamos que dejaron de buscar a mi mamá en vida, algo que no debería ocurrir hasta que no haya indicios claros de su muerte", dijo Castelblanco.
La familia lamenta la actitud del Fiscal Herrera y la desaceleración de los esfuerzos por parte de las autoridades, destacando que ha habido constantes vacíos en la investigación y falta de transparencia por parte de la Fiscalía de Coahuila.
Finalmente, Juan Pablo hizo un llamado a las autoridades para que cumplan con su deber de continuar con la búsqueda y la investigación de su madre, asegurando que la familia seguirá exigiendo respuestas y justicia.