Obra del nuevo ISSSTE.
Pese a que el Gobierno federal aseguró que el nuevo Hospital Regional de Alta Especialidad (HRAE) de Torreón se entregaría el 31 de marzo de 2024, la dirección general del ISSSTE informó anoche que en la actualidad, la obra representa un avance físico del 92.48 por ciento y que se estima que su conclusión será para el 31 de mayo del presente año.
Además, se actualizó el monto de inversión, al pasar de tres mil 028 millones de pesos a tres mil 565 millones 797 mil 844 pesos.
La obra se ubica en el ejido La Joya y se edifica sobre una superficie total de 98 mil 117.90 metros cuadrados, de los cuales 43,342.85 son de construcción. El Instituto detalló que se trata de un proyecto de construcción de obra “llave en mano”, es decir, se entregará un hospital totalmente equipado y en funcionamiento.
Además, se informó que contará con 250 camas censables en beneficio de un millón 781 mil 112 derechohabientes y sustituirá al Hospital General “Dr. Francisco Galindo Chávez”, el cual será referencia de servicios de atención de tercer nivel de los estados de Durango, Coahuila, Chihuahua, Tamaulipas y Nuevo León.
El Hospital Regional disminuirá el rezago en la consulta, cirugías y estudios de gabinete y, ofrecerá a la derechohabiencia 35 especialidades: psiquiatría, endocrinología, angiología, alergología inmunológica, reumatología, gastroenterología, neurología, hematología, infectología, medicina interna, oncología médica, neumología, dermatología, cirugía pediátrica, pediatría, neonatología, ginecología y obstetricia, perinatología, cirugía general, anestesiología, oncología quirúrgica, ortopedia, traumatología, neurocirugía, proctología, oftalmología, geriatría, cardiología, otorrinolaringología, urología, algología, nutrición, nefrología, cirugía maxilofacial, telemedicina, colposcopia, entre otras.
De acuerdo con lo programado, se tendrá un equipamiento médico de última tecnología, en el que destaca: acelerador lineal, resonancia magnética, un tomógrafo para realizar simulaciones, sillones y máquinas de hemodiálisis y un área de medicina física en rehabilitación, en la que se construye una tina de Hubbard, misma que es indicada para mayor relajación muscular y que funciona con un mecanismo de propulsión de agua.
Según el ISSSTE, incluirá ocho quirófanos, uno de ellos asignado al servicio de cardiología, donde el código infarto será atendido inmediatamente en la sala de hemodinamia; área de medicina nuclear que dará atención de lunes a viernes en turno matutino y vespertino, contará con dos cámaras de centelleo y cuarto caliente, el cual tendrá una sala de inyección de iodo y un tomógrafo con emisión de positrones (PET), que es un equipo de alta tecnología que orienta y ayuda en el diagnóstico y tratamiento de los pacientes con cáncer, pues evalúa las funciones de los tejidos y órganos y permite identificar de manera temprana la enfermedad. Tendrá también un área de esfuerzo físico y de radioterapia, que contará con un acelerador lineal y sala de braquiterapia, ambos también importantes para el tratamiento de personas con padecimientos de este tipo.
Entre los servicios auxiliares de diagnóstico contará con: imagenología, laboratorio de análisis clínicos, banco de sangre, anatomía patológica, resonancia magnética y medicina nuclear, con lo que ofrecerá una atención integral en el diagnóstico oportuno y tratamiento de pacientes.
Además, este hospital estará equipado con 12 elevadores, tres equipos Chiller de 500 toneladas cada uno, dos plantas de emergencia, 54 unidades de enfriamiento (UMAS) y una planta de tratamiento de aguas residuales, que se aprovecharán para sanitarios y riego de áreas verdes; dos calderas, un sistema contra incendios, circuito cerrado de video vigilancia y un helipuerto.
Autoridades federales sostuvieron que la edificación de esta unidad no representará deuda alguna para el instituto, ya que su construcción y equipamiento se hace con recursos propios “bien administrados y con transparencia”.
