José Luis subió el Cerro de las Noas por lo menos en tres ocasiones antes del Viacrucis.
Por tercer año consecutivo, José Luis Rivera interpretó a Jesús en el Viacrucis del Cerro de la Noas, papel que requirió de una ardua preparación tanto física como espiritual.
Entrevistado minutos antes de interpretar la Pasión y Muerte de Jesús, el joven de 34 años de edad se dijo emocionado, sobre todo porque como en cada año lo ha dedicado a su familia por el apoyo incondicional recibido.
"Primero es un privilegio y un honor (interpretar el papel de Jesús) porque es uno de los personajes más conocidos y por lo tanto es una responsabilidad. Año con año se la dedico siempre a mi familia, que siempre son los que están detrás de mí apoyándome e impulsando y creyendo en mí", dijo ataviado con barbas y túnica.
José Luis compartió que desde enero se prepara de forma espiritual y física, dada la exigencia que demanda el papel. "Tengo dos tipos de preparación que es la espiritual y la física, en la espiritual trato de meditar todos los días, orar, concentrarme", dijo emocionado.
Como parte de esa preparación, indicó que toma como referencias algunas series referentes a la vida de Jesús, así como leer sobre todo lo relacionado a sus últimas horas. En lo cuanto a la parte física, el ayuno es parte importante. "Hago el ayuno como lo hizo Jesús 40 días antes".
Además, subió por lo menos en tres ocasiones al Cerro de las Noas con la cruz que llevaría en sus hombros, cuyo peso oscila entre los 40 y 45 kilogramos. "También venimos y ensayamos al cerro un par de veces para subir con la cruz para acostumbrarme al peso y a la subida", detalló.
Asimismo, durante el año, procura hacer ejercicio, sobre todo natación, la cual le permite tener la condición suficiente que requiere esta representación.
En esta ocasión, José Luis le impregnó su sello personal. "Lo que he traído es impregnar un sello más personal y espiritual a los diálogos, tratar de que sean más cercanos a la gente.Trato de mejorar año con año".
Y así fue. Los cientos de personas que se dieron cita en el Santuario, se vieron conmovidos por su papel y con el del resto de los personajes dirigidos por Tomy Parga.
En los dos primeros años, la respuesta que obtuvo de la gente fue muy buena, compartió. "Muy bien, el año pasado estuvo increíble, la gente participó mucho, se acercó mucho al final de la representación conmigo a darme palabras bonitas y eso es una muestra de que les gustó, yo creo que este año va ser igual o más porque estamos esperando más público que el año pasado".