Las normas de calidad del aire establecen las concentraciones máximas de contaminantes que no debieran ser excedidas. (ARCHIVO)
Este año La Laguna de Durango se quedó sin datos sobre los índices de contaminación en la región debido a que las cuatro estaciones ambientales con las que se cuenta se encuentran en mantenimiento, según indica el Sistema de Monitoreo de la Calidad del Aire del Estado de Durango (Simca). Las estaciones se ubican en el Parque La Esperanza y la colonia El Campestre del municipio de Gómez Palacio así como en el Instituto Tecnológico de Lerdo y Sagarpa (hoy Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader)).
Pero no solamente en esta región hay estaciones en mantenimiento sino también las que se encuentran en Durango capital, como la instalada en la Secretaría de Recursos Naturales y Medio Ambiente (SRNyMA) y del Instituto Tecnológico de Durango.
Hasta ayer, la única que estaba operando es la estación del Instituto Politécnico Nacional Unidad Durango que a las 15:40 horas marcaba una calidad del aire aceptable, contaminante predominante PM10, concentración de 56 y riesgo moderado. La recomendación a la población fue reducir las actividades físicas vigorosas al aire libre.
Las normas de calidad del aire establecen las concentraciones máximas de contaminantes en el ambiente que no debieran ser excedidas, a fin de garantizar la protección de la salud de la población.
En México se norman los siguientes contaminantes atmosféricos: bióxido de azufre (SO2), monóxido de carbono (CO), bióxido de nitrógeno (NO2), ozono (O3), partículas menores a 10 micrómetros de diámetro (PM10) y partículas menores a 2.5 micrómetros de diámetro (PM25). En Durango, y cuando están funcionando las estaciones, la calidad del aire se puede consultar en la página de Internet: http://calidadaire.durango. gob.mx/contaminantes.
En agosto de este año, Jesús Martínez Martínez, subsecretario de Recursos Naturales y Medio Ambiente en La Laguna de Durango, explicó que las casetas de monitoreo estaban en un proceso de actualización y de mantenimiento, de manera que “pues no hay datos, porque no están operando, no están midiendo”.
En ese entonces, el funcionario dijo que lo anterior se debía al avance de la tecnología, por lo que había necesidad de ir actualizando el software directo en algunos de los equipos.
Además, refirió que los meses más complicados en cuanto a la contaminación del aire, de acuerdo a la estadística, suelen ser febrero y marzo a causa de las tolvaneras, también parte de abril, mientras que en la temporada de lluvias se purifican el ambiente y se mejora la calidad del aire.
