La razón por la cual Laura Zapata está distanciada de sus hermanas

No hay nada como el crecer entre hermanos, compartir juegos y travesuras y, que en la etapa adulta, se conviertan en bellos recuerdos, lamentablemente este no fue lo que sucedió con las hermanas Sodi; Miranda, Federica, Ernestina, Gabriela y Thalía, y su media hermana Laura Zapata, quien desde pequeña tuvo una relación distante con ellas, situación que se acrecentó desde un hecho trágico que dividió a la familia.

Laura Zapata es la mayor de este grupo de talentosas mujeres, fue la única hija, producto del matrimonio de Yolanda Miranda y Guillermo Zapata Pérez de Utrera, quienes se separaron cuando la villana de telenovelas era muy pequeña.

Cuando la también cantante tenía tres años de edad, su madre contrajo segundas nupcias con el criminólogo Ernesto Sodi Pallares, quien la rechazó, motivo por el cual su madre la llevó a vivir con su abuela Eva Mange, quien se encargó de cuidarla y darle todo lo necesario; esto creó un distanciamiento entre ella con su madre y sus medias hermanas.

Si bien la relación no era tan cercana entre Laura y las hermanas Sodi, sí era cordial e incluso llegó a trabajar con su hermana Thalía en las telenovelas "María Mercedes" (1992) y "Rosalinda" (1999); esto cambió en 2002 cuando ella y su hermana Ernestina fueron secuestradas.

Fueron 45 días lo que duró el cautiverio, aunque Laura fue liberada dos semanas antes que su hermana Ernestina, lo que comenzó a hacer mella entre la relación de las hermanas. La fractura se hizo más grande cuando dos años después Titi, como llamaban de cariño a Ernestina, decide escribir el libro Líbranos del mal, donde no sólo aborda el detalle de su secuestro y las secuelas que esto tuvo en su vida, también presentó la posibilidad de que Laura hubiera esta involucrada en dicho suceso.

Aunque Ernestina explicó que antes de publicar el libro habló con Laura, para aclararle que lo que escribió ahí era para lastimarla o causarle un daño, la actriz lo tomó muy mal y declaró en un encuentro con los medios:

"Hay muchas mentiras en ese libro para vender, es una de las tristezas más grandes, yo le llamo la puñalada trapera".

Las cosas se agravaron cuando en 2005, Laura decidió hablar de lo sucedido, pero a través de una obra de teatro la cual fue escrita por Víctor Hugo Rascón Banda, la familia Sodi en pleno, incluyendo a Thalía, le prohibieron seguir adelante con el proyecto, cosa que no hizo y estrenó "Cautivas" en el Teatro Helénico, protagonizada por ella y Verónica Langer; aquí hubo un rompimiento con ella.

Cuando Yolanda Miranda muere el 27 de mayo de 2011, debido a un derrame cerebral, las hermanas se vuelven a reunir, incluida Laura Zapata, y prometen mantenerse unidas dejando los pleitos atrás, además de cuidar a su abuela Eva Mange.

Esta buena intención duró poco, porque un año después, las hermanas enfrentaron una demanda por parte de su abuela, que les exigía pensión alimenticia y la devolución de 125 mil pesos que le dio a su hija Yolanda para que se los guardara; en ese momento Laura Zapata ya se hacía cargo de doña Eva por completo.

Sobre esto Thalía explicó al programa "El Gordo y la Flaca", que desde la muerte de su mamá se la abrió una cuenta bancaria a su abuela, con el fin de que las cinco hermanas depositaran mensualmente una cantidad de dinero para ella, luego señaló que sólo cuatro lo hacían, sin mencionar quien no cumplió con su palabra, pero que ya estaba cansada de tanto problema, además aseguró que Laura no dejaba que ellas se comunicaran con su abuela.

El asunto no avanzó a más y las hermanas Sodi le entregaron una carta a la señora Eva, donde le aclaran que su madre le devolvió el dinero que reclamaba. Con el paso de los años la salud de la matriarca se fue deteriorando y Laura Zapata se quejaba de que la única que la apoyaba económicamente con su abuela, era su hermana Thalía, quien estuvo presente en varios cumpleaños de la señora.

Cuando Eva Mange muere el 24 de junio de 2022, a los 104 años, Laura Zapata explicó que su hermana Thalía se despidió de ella, a través de una llamada telefónica y que su abuela murió en sus brazos; Laura fue la única que estuvo en el sepelio y desde entonces el acercamiento con sus hermanas es casi nulo, por lo que no pudo arreglar las cosas con su hermana Ernestina antes de que muriera la noche de este viernes.