Un brote de aguas negras lleva semanas en la colonia Graciela Fernández de Matamoros.
Han pasado tres semanas desde que se registró un brote de aguas negras en la colonia Graciela Fernández de Matamoros y, pese a que en repetidas ocasiones se ha reportado a Simas, los vecinos no han tenido respuesta.
El lunes, les comentaron que, debido a que el anterior “ingeniero” encargado de resolverles ya no laboraba en el sistema, hasta que se nombrara a alguien, les resolverían.
Las vecinas manifestaron que el agua sale de la tubería, incluso se formó un pozo de al menos un metro de profundidad, donde un muchacho se cayó, por lo que tienen temor de que pase un accidente similar con los niños, ya que superficialmente se observa pequeño el agujero.
Lo que hicieron algunas personas es colocar bordos al frente de sus domicilios para encauzar el agua pestilente hacia el otro lado de la calzada Lázaro Cárdenas, justo en donde hay casas en construcción.
Una de las señoras dijo que colocó una tabla, con bolsas de hule, como medida de prevención para evitar que nuevamente se cayera una persona o un automóvil, pero con la fuerza que hace el agua, ya que se observa que sale el chorro con una ligera presión, aventó el pedazo de madera, la cual tenía clavos y ocurrió que por ahí pasó una unidad de Seguridad Pública y se ponchó.
"Hasta le echaron carrilla, que por mi culpa se les había ponchado la patrulla a los policías", dijo la señora.
Las amas de casa mencionaron que no se tiene tanto problema con la red de drenaje, incluso el agua no sale por la alcantarilla y sospechan que fue un tubo que se “reventó”, porque está justo al frente de los domicilios, pero repitieron que el agua empezó a salir hace como tres semanas y ya es molesto para ellas por los fétidos olores, además de que recalcaron que se puede registrar un accidente con los menores, sobre todo por la noche, ya que aunque hay alumbrado público, podrían caminar distraídos y caer, al igual que un automovilista.