Gracias a la voluntad y altruismo de familiares de un hombre de 40 años de edad del municipio de Gómez Palacio, Durango que fue diagnosticado con muerte cerebral, el pasado martes por la noche fue posible la primera donación multiorgánica de este año en la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) No. 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de Torreón.
El donante ingresó al hospital el pasado lunes luego de sufrir un evento hemorrágico derivado de una enfermedad crónico-generativa que padecía y, consciente de las condiciones en las que se encontraba y en medio de su dolor, su esposa aceptó con generosidad, destinar sus dos riñones y dos córneas a cuatro pacientes que están luchando por su vida y que se espera puedan ser trasplantados esta misma semana en la clínica No. 71.
Hugo Ruíz Cerna, coordinador hospitalario de Donación de Órganos y Tejidos con fines de Trasplante en la UMAE, explicó tras diversos estudios, se confirmó la muerte cerebral del paciente y se determinó que era candidato para seguir dando vida después de la vida por lo que su familia, accedió a donar sus riñones y córneas.
El donador altruista era integrante de una familia muy numerosa por lo que pidieron a la institución de salud la posibilidad de despedirlo mediante una valla de honor. En un momento muy emotivo, 50 familiares y personal de salud del Hospital de Especialidades lo llenaron de aplausos antes de su ingreso al quirófano.
El médico Ruíz Cerna agradeció a la familia por este acto de amor con el cual se fortalece el Programa Institucional de Donación y Trasplante de Órganos, Tejidos y Células, que busca beneficiar al mayor número posible de derechohabientes.
En México, hay miles de personas con enfermedades crónicas que se encuentran inscritos en el Registro Nacional de Trasplantes, en espera de un órgano o tejido. Mismos que solo pueden obtenerse mediante una donación. Por este motivo, el coordinador hizo un llamado a la población para que platiquen el tema de la donación en el hogar e invitó a consultar la página de Internet del Centro Nacional de Trasplantes: https://www.gob.mx/cenatra o visitar la página del IMSS en la liga: www.imss.gob.mx/salud-en-linea/donacion-organos, donde las personas interesadas pueden acreditarse como donadoras voluntarias.
HAY VIDA DESPUÉS DE LA VIDA
La Ley General de Salud (LGS) indica que la donación es el consentimiento de una persona para que, en vida o después de su muerte, cualquier órgano o tejido de su cuerpo sea utilizado para trasplantes.
Hay dos tipos de donaciones. Una de ellas es en vida por lo que las personas entre 18 y 65 años, después de pasar una serie de estudios médicos y psicológicos, pueden donar un riñón, un segmento del hígado y médula ósea, con la finalidad de no poner en riesgo su salud.
Otra donación es después de la muerte. Pueden ser donantes los pacientes entre 2 y 70 años que hayan perdido la vida por muerte encefálica, de quienes se obtienen órganos (corazón, pulmones, hígado, páncreas, intestino, riñones) o tejidos (córneas, músculo, hueso y piel); también podrán donar tejidos aquellos pacientes que murieron por un paro cardiaco irreversible; en ambos casos se realizan los estudios necesarios para asegurarse de que los órganos y tejidos son viables para beneficiar a los receptores, ya que no todas las personas que fallecen pueden ser donadores y hay que cerciorarse de que no transmitan infecciones o cáncer.
La LGS, contempla que todas las personas mexicanas son donadoras de órganos o tejidos (consentimiento tácito), por lo que si deciden dar vida después de la muerte y convertirse en donadoras lo más importante es que sus familias lo sepan, para que en ese momento en que un familiar fallece, que es el más difícil para cualquier persona, tomen esta decisión.
También pueden manifestar su voluntad firmando una tarjeta de donador voluntario, o el consentimiento expreso que emite el Centro Nacional de Trasplantes; sin embargo aun teniendo estos documento, la familia es la que tiene la última palabra para autorizar la donación, por lo que es sumamente importante que ellos estén enterados.
Valla de honor al paciente donador. (ANGÉLICA SANDOVAL)