Ceremonia de de imposición de ceniza en catedral de Saltillo. (PENÉLOPE CUETO)
El obispo de Diócesis de Saltillo, monseñor Hilario González García, recordó que la cuaresma es un tiempo de conversión y de gracia para volver nuestra vida y nuestro corazón a Dios, y llamó a que ello se traduzca en actitudes de reconciliación.
En la ceremonia de imposición de ceniza, en la catedral de Saltillo, recordó que con esta acción da inicio con la Cuaresma, período litúrgico de 40 días con el que los creyentes recuerdan el ayuno que Jesús realizó en el desierto de Judea.
“Es un tiempo de conversión y de gracia para volver nuestra vida, nuestro corazón a Dios. Que esta petición que le hacemos a Dios, de conversión, de gracia, se traduzca también en actitudes de reconciliación con Dios y los demás”, indicó.
Expuso que este tiempo motiva a la solidaridad, al acompañamiento y ayuda hacia quienes se enfrentan a alguna situación adversa.
“Un tiempo para acercarnos al que está necesitado, desvalido, como los buenos samaritanos que somos invitados a imitar a Jesús”, señaló el religioso al recordar que durante este período se acostumbra el ayuno y evitar el consumo de carne roja, ya que representa el cuerpo de Jesús.