La atacante estadounidense Trinity Rodman (22) y la zaguera mexicana Karen Luna (5) pugnan por el balón en el partido de la Copa Oro femenina de la CONCACAF, el lunes 26 de febrero de 2024, en Carson, California. (AP Foto/Ryan Sun)
Aunque las integrantes del equipo de Estados Unidos llevan años luchando para fomentar el nivel del futbol femenino en todo el mundo, derrotas inevitables contra oponentes que antes dominaba no dejan de doler.
“La gente comenta que todas nos están pisando los talones. Era obvio y es lo que necesitaba ocurrir en el futbol femenino", dijo la delantera estadounidense Alex Morgan luego que Estados Unidos perdió 2-0 ante México el lunes en la Copa Oro de la CONCACAF. “¿Queremos seguir primeras? Sin duda alguna, pero hay que jugar con actitud y eso nos ha faltado eso hoy”.
Fue apenas la segunda victoria de México ante Estados Unidos. La otra — en un historial de 43 encuentros — se remontaba a 2010, un triunfo 2-1 en Cancún por las eliminatorias del Mundial.
Esta derrota, en un contexto turbulento para la selección estadounidense, sin duda suscitará cuestionamientos.
“Hace 10 o 15 años atrás, los resultados eran muy distintos a los de hoy. Creo que los aficionados pueden darse cuenta de que todos los equipos siguen mejorando y evolucionando para competir al más alto nivel. Si no es tácticamente, se ve en la técnica, en la parte mental o en lo físico”, analizó Morgan. “Las selecciones están ejecutando su plan táctico contra las mejores selecciones del mundo y al mismo tiempo están mejorando”.
Estados Unidos se proclamó campeona en ediciones seguidas del Mundial femenino, en 2015 y 2019. Pero a medida que el fútbol femenino captó más interés, otras federaciones empezaron a invertir en sus equipos, y las ligas profesionales se consolidaron internacionalmente. Las mujeres estadounidenses marcaron la pauta al hacer campaña para recibir un pago equitativo al de sus colegas hombres.
Estados Unidos acudió a los Juegos Olímpicos de Tokio con la ambición de una medalla de oro, pero se marchó con un bronce.
Cerraron 2022 con tres derrotas en los amistosos contra Inglaterra y España en Europa y Alemania en Florida.
El desempeño estadounidense en el Mundial del año pasado evidenció las debilidades del equipo nacional. Naufragaron en los octavos de final al caer por penales ante Suecia. Fue la eliminación más prematura de Estados Unidos en un Mundial.
Morgan y la zaguera Becky Sauerbrunn formaron parte del equipo de 2010 que perdió ante México. Con la victoria en estadio de béisbol, México se clasificó al Mundial de 2011. México perdió ante Canadá en la final del torneo eliminatorio y Estados Unidos derrotó a Italia en un repechaje para ir al Mundial.
“Te puedes dar cuenta del resultado que se invierta en las jugadoras, compitiendo todo el año, y disponer de los mismos recursos de los hombres. Es normal que se vea un crecimiento competitivo a nivel internacional”, acotó Morgan.
Pese a la derrota del lunes, Estados Unidos sorteó su grupo en la Copa Oro y aspira al título del torneo regional. Pero tendrán que levantar cabeza de inmediato para encarar los cuartos de final.
La noche del lunes, las estadounidenses nunca se recuperaron del golpe tras el gol de Lizbeth Ovalle que adelantó a México a los 28 minutos. Tras un pase en profundidad, Ovalle, jugadora de Tigres de Monterrey, le ganó a la carrera un balón a Sauerbrunn y luego lo picó por encima de la arquera Alyssa Naeher y otras dos defensoras.
Fue el primer gol encajado por Estados Unidos ante una rival de la CONCACAF en 33 partidos. Mayra Pelayo sentenció para México en los descuentos.