Alexa (ESPECIAL)
Alexa, el asistente de Amazon, cuenta con una luz que se enciende en varios colores. Todos ellos le comunican al usuario notificaciones, llamadas, el procesamiento de solicitudes, actualizaciones y mucho más.
Pero ¿has notado que tu dispositivo inteligente emite una luz roja? En Tech bit te contamos de qué se trata y si realmente debes preocuparte por ello.
¿Qué significa la luz roja de Alexa?
Alexa es el asistente virtual más popular del mercado. Una de sus funciones destacadas es la capacidad que tiene para controlar dispositivos que sean compatibles, incluyendo lámparas, cámaras de seguridad y sistemas de alarma en la casa.
Para establecer comunicación con sus usuarios, los equipos Echo vienen equipados con luces que nos informan su estado y funcionamiento. No obstante, muchas veces desconocemos su significado.
De acuerdo con Amazon, la luz roja fija aparece cuando se presiona el botón de encendido/apagado del micrófono. Así que puedes estar tranquilo porque no representa un problema mayor.
En realidad, el color rojo nos indica que el micrófono del dispositivo está desconectado y que Alexa no está escuchando. Mientras que en dispositivos Echo con cámara, la barra de luz roja significa que el video no se compartirá.
¿Quieres entender mejor a tu asistente virtual? Estos son los significados de otros colores que podría emitir:
Amarillo: Alexa tiene un mensaje o notificación para ti.
Cian sobre azul: Alexa está escuchando y procesando la solicitud.
Cian girando: Significa que el dispositivo se está iniciando.
Naranja: El dispositivo está intentando conectarse a internet.
Verde: Echo está recibiendo una llamada.
Morado: El modo "No molestar" está activado.
Blanco: Ajuste en los niveles de volumen.
¿Qué hacer cuando Alexa tiene una luz roja?
Cuando la luz roja está encendida, no podrás comunicarte con Alexa. Afortunadamente, puedes realizar algunos trucos para solucionar el problema y aquí te los compartimos:
Revisa el micrófono: Comprueba si se encuentra desactivado y de no ser así vuelve a activarlo con un toque.
Comprueba la conexión a internet: Alguna falla o interferencia en el WiFi o los datos móviles podría ser la causa del problema. Verifica que Alexa reciba la señal de internet.
Reinicia el altavoz: En ocasiones, basta con reiniciar nuestro asistente virtual para que trabaje adecuadamente.
