Reformas a INFONAVIT, una burla para sectores obrero-patronales: CANACINTRA Sureste
Eduardo Garza Martínez, Presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA) Coahuila Sureste, expresó su rotundo rechazo a las reformas del INFONAVIT, calificándolas como una "burla" debido a la exclusión de los sectores obrero-patronales en los nuevos comités del instituto.
"Es muy claro que se están perdiendo los pesos y contrapesos, y lo que estamos viendo es un abuso de autoridad", afirmó Garza Martínez, quien cuestionó las modificaciones que dejan fuera a la iniciativa privada, las centrales obreras y al gobierno en la toma de decisiones del INFONAVIT.
El dirigente empresarial consideró que, después de más de 50 años de funcionamiento como un organismo tripartito, el instituto ha sido un pilar fundamental en la política habitacional del país, y advirtió que la modificación de su estructura podría comprometer su efectividad.
Garza Martínez subrayó que el cambio de estructura plantea un grave riesgo de centralización del control del INFONAVIT por parte del gobierno, lo cual, a su juicio, podría dar lugar a un manejo indebido de los recursos destinados a la vivienda de los trabajadores.
"Ahora resulta que el Gobierno quiere manejar el INFONAVIT como le dé la gana. Están queriendo poner al Ejército a construir casas, y eso es inaceptable", manifestó.
El líder empresarial también hizo hincapié en la grave problemática que enfrenta el estado de Coahuila en términos de vivienda. En los últimos seis años, señaló, el INFONAVIT ha dejado de construir las casas necesarias para los trabajadores, a pesar del aumento continuo de empleados que llegan a la entidad.
"Los trabajadores están afiliados y no tienen casas para comprar", lamentó e hizo un llamado urgente a la reactivación de proyectos habitacionales que puedan responder a esta creciente demanda de vivienda.
Garza Martínez insistió en la necesidad de una revisión profunda del modelo de gestión del INFONAVIT, para asegurar que siga cumpliendo su misión de garantizar acceso a la vivienda digna para los trabajadores mexicanos, sin que se ponga en riesgo su funcionamiento eficiente y transparente.
En este contexto, el dirigente empresarial advirtió que, si las reformas continúan en su dirección actual, podría agudizarse la crisis habitacional en la región, afectando a miles de trabajadores que confían en el instituto para acceder a una vivienda propia.