¡Se equivocan! Le dan de tomar limpiador multiusos a paciente de clínica 46 del IMSS
Por una obstrucción en las arterias coronarias, Mario Luis, de 58 años de edad fue internado el pasado lunes en el Hospital General de Zona (HGZ) No. 46 del IMSS de Gómez Palacio.
Magdalena Canales, su hija, narró que el señor llegó al mediodía a la clínica con un dolor en el pecho y de cabeza pero lo hospitalizaron hasta las 6 de la tarde. En la tarjeta de identificación del hospital, la hora de ingreso que se marcó fue a las 13:17 horas.
El señor actualmente está a la espera de un diagnóstico o a que le den un pase para que sea atendido por un médico especialista en Cardiología en la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) No. 71 del Seguro Social de Torréon.
“Ayer que fueron a checarlo y le dicen ‘es que tiene obstrucción del lado izquierdo’ y mi mamá le dice ‘no joven, es del lado derecho’, el residente checa el informe y le dice ‘sí, es del lado derecho pero todavía no podemos darle un diagnóstico porque no le hacemos los estudios pertinentes. Les digo ‘bueno, y ¿como cuándo podrán hacer esos estudios?’ y me dice ‘no, es que aquí en la 46 no tenemos cardiólogo’”.Adicional a esta situación, ayer hubo una equivocación en el servicio de alimentación hospitalario. Minutos después de las 2 de la tarde, el personal del HGZ llegó al cuarto de Mario Luis y le entregó su comida junto con un vaso que parecía agua de jamaica pero que según sus familiares, resultó ser fabuloso (limpiador multiusos) y que le dejó la lengua escaldada.
“Fueron a darle de comer, todo bien, estaba acompañándolo mi hermano y al momento de querer mi papá, tomar el agua que le llevaron, le da un trago y se da cuenta que sabía muy mal, empieza a vomitar y mi hermano le dice ‘¿qué pasó papá?’, agarra el vaso, le toma y sabe feo, sale mi hermano ahí en Urgencias y les empieza a gritar ‘nadie se tome el agua porque no es agua’. Una enfermera lo agarra, lo prueba y se queda desencajada y dice ‘esto no es agua’.
Fue mi hermano y otro familiar de un paciente a quejarse a coordinación, llegó el coordinador y el encargado de Cocina diciendo que se habían equivocado der jarras que porque están haciendo remodelaciones. Y pues entre dimes y diretes, el coordinador le dijo a mi papá que quería de comer, que lo que quisiera él se lo traía, que quería un corte de carne que él se lo llevaba, que no se preocupara por nada y que acudiría un médico a checarlo y que por cierto llegó hasta las 10 y media de la noche y que dijo que no tenía nada, pero mi papá estaba escaldado, quemado de la boca”, declaró.
Magdalena cuenta que más tarde llegó personal de limpieza para trapear la habitación y que Mario Luis asoció el olor con la bebida que se tomó. “Ahí nos dimos cuenta que sí era un tipo de fabuloso”, aseguró.
La familia de Mario Luis denunció una presunta negligencia médica y llamó al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a atender su denuncia, considerando que en el interior de las clínicas se debe proveer de un servicio adecuado de alimentación a los pacientes, acorde a sus necesidades nutricionales y a su estado de salud.