La evaporación y las condiciones de los canales de riego son factores que propician la pérdida de agua de la presa, señala la Cámara Agrícola.
Más del 10 por ciento del agua destinada para el riego de cultivos que proviene de la presa se pierde entre la evaporación y fugas en la infraestructura que va a los módulos de la Comarca Lagunera.
Marcelo Valdés Quintanilla, presidente de la Cámara Agrícola y Ganadera de Torreón, dijo que el clima caluroso en la región propicia la evaporación del líquido mientras transita por los canales y a esto se suma que en algunos hay hoyos, lo que causa algunas fugas. En este sentido, consideró que se requiere de una inversión en la infraestructura.
"Necesitamos que se haga una inversión en infraestructura en los canales de riego para no tener tanta pérdida del agua, por evaporación o por los diferentes agujeros que hay en los canales, esto corresponde a Conagua, los módulos deben señalar las partes afectadas", expuso.
Consideró que se trata de un gran porcentaje de agua que se pierde por las condiciones de los canales, algunos incluso tienen un riesgo de desborde si no se realiza un reparto adecuado del volumen.
"Se requiere de un reparto conforme a quienes cuentan con sus derechos de agua", dijo.
A una semana del arranque del ciclo agrícola en la región, Valdés Quintanilla dijo que esperan que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) cumpla con la entrega del volumen autorizado, de 800 millones de metros cúbicos (Mm3), que significará un reto en función de que se tenga una buena distribución, en tiempo y forma, para que se puedan tener adecuadamente los riegos.
"Hay una disminución en el volumen autorizado, entonces se requiere que haya una buena distribución y coordinación entre los módulos con Conagua, que las aperturas se hagan a tiempo para poder estar surtiendo a los socios, se va a reducir bastante la lámina en relación a años pasados, cuando eran hasta 950 Mm3", comentó.
En términos de los insumos, el titular de la Cámara Agrícola dijo que les ha beneficiado el tipo de cambio, que ha dejado de ser tan alto, por lo que se espera que sea un mejor ciclo, en comparación con el año pasado.
Valdés Quintanilla dijo que las altas temperaturas que se han registrado en la región podrían afectar los rendimientos, pero más aún, la falta de frío, pues las heladas que se presentan en el campo lagunero suelen acabar con las plagas y este año fueron muy pocas.
"Cada una de las heladas mata las plagas, nos hizo falta más frío para que pegara, ya por lo que estamos viendo, no va a pegar", indicó.
