TRATAMIENTOS PREVENTIVOS EN CARIOLOGÍA
El enfoque en el tratamiento de las lesiones cariosas que afectan el tejido dentinario se ha modificado de forma dramática en las últimas décadas. El conocimiento acerca de la etiología de la caries dental, la fisiopatología dentinaria y el desarrollo de biomateriales dentales y técnicas adhesivas, han confluido en tratamientos de mínima intervención.
Existimos muchísimas personas que fueron atendidas por los odontólogos bajo el criterio de "extensión por prevención" de hecho ese era el principio cuando éramos estudiantes, ya que nos explicaban nuestros maestros que extirpáramos más del tejido dentario para no dejar nada de contaminación de la caries existente. Lo bueno que muchos de nosotros seguimos estudiando y en vanguardia, y no contribuimos a esa mutilación innecesaria y los adultos jóvenes que fueron atendidos bajo esa diciplina tienen excelente salud oral. Recuerden el mito de cuando sea adulto mayor me quedare sin dientes no es cierto, por supuesto que hay otras causas por las cuales se pueden perder, en ocasiones imposible evitar, aunque asistan con el odontólogo, ejemplo el trauma oclusal.
El avance de los conocimientos en prevención y la formulación del tratamiento de la caries dental como una enfermedad infecciosa ha caracterizado la producción científica y las transferencias clínica y sanitaria referidas al tema en los últimos 35 años.
Los estudios histológicos han revelado que la capa superficial aparentemente intacta sobre la subsuperficie desmineralizada de la caries inicial puede interpretarse como consecuencia de la remineralización, o como una capa de mayor resistencia a la desmineralización debido a que su contenido es de 1.000 - 2.000 partes por un millón (ppm) de fluoruro mientras que la subsuperficie tiene 100 ppm.
Este hecho marca las dos dimensiones de acción del fluoruro: como tratamiento o como agente preventivo. Los efectos antimicrobianos del fluoruro desempeñan un papel importante en la prevención de caries (Petersson y col., 1992). El ion actuaría alterando la adherencia, el crecimiento y metabolismo de las bacterias y por lo tanto disminuyendo la cantidad de ácido presente en el medio (Bowden, 1990; Huizinga y col., 1991).
La acción del fluoruro sobre la célula bacteriana es influida por el pH ambiental y por la concentración del ion. En virtud de esta nueva alternativa en el tratamiento de las lesiones dentinarias, es necesario evaluar la posible recuperación de la dentina mediante tratamientos remineralizantes y el desarrollo de materiales bioactivos que posibiliten la reparación o regeneración del tejido imitando los mecanismos fisiológicos de mineralización y recomponiendo las propiedades mecánicas originales del tejido, con el fin de obtener resultados clínicos exitosos basados en tratamientos con enfoque biomimético. Estos materiales bomimeticos, se están investigando y muchos de ellos, ya empezamos a colocar en la práctica odontológica.
Todo con la finalidad de hacer tratamientos mínimamente invasivos, pero recuerden es muy importante el apoyo del paciente, comida sana, higiene oral muy escrupulosa y visitas frecuentes al odontólogo, estas visitas son para prevenir, no para mutilar, su odontólogo debe de tener el criterio que no toda mancha es caries. No solo con fluoruro vamos a remineralizar, hay otras formas de hacerlo. Numerosas formas de aplicación de los fluoruros se encuentran disponibles en el mercado actual.
Los tejidos dentarios pueden ser expuestos a diferentes concentraciones y formas de aplicación. Las concentraciones empleadas por las diferentes ofertas tecnológicas en términos de partes por millón son: Aguas de consumo: 0,7-1,2 ppm, Sal fluorada: 200-250 ppm, Enjuagatorios diarios: 225 ppm, Dentífricos para niños: 250 a 500 ppm, Enjuagatorios semanales: 920 ppm, Dentífricos para adultos: 1.000-1.500 ppm, Geles de auto aplicación controlada: 4.450-9.000 ppm, - Aplicación profesional en solución de FNa: 9.200 ppm, Aplicación profesional en forma de gel o espuma: 12.300 ppm, Aplicación profesional en solución de SnF2: 19.500 ppm, Aplicación profesional en forma de barniz: 22.600 ppm.
Continuará…