De miedo. Rafael Perrín y Ernesto D' Alessio hicieron vivir a los laguneros una velada de terror.
El otoño en la Comarca Lagunera no sólo trae consigo un descenso paulatino de temperaturas o la caída de las hojas de los árboles caducifolios, también lo acompañan las leyendas; hay una mujer en particular que para estas fechas es muy común que regrese, la conocen como: La Dama de Negro.
La mujer, vestida de color negro, cuyo rostro se esconde detrás de un velo, volvió a cumplir su objetivo este año, la tarde y noche de este miércoles 9 de octubre.
La puesta en escena (que dicho sea de paso, está de festejo por su 30 aniversario) La Dama de Negro, congregó a cientos de laguneros deseosos de vivir una experiencia teatral inmersiva en dos funciones en el Teatro Nazas, una a las 7:00 y otra a las 9:30 de la noche.
Cuando el reloj marcó las 19:10 horas se dio la segunda llamada de la primera función, acompañada con un exhorto para el público: apagar sus celulares para adentrarse en la historia que a continuación se ofrecería.
Después de la tercera llamada, el teatro de Torreón ubicado en la calle Cepeda esquina con avenida Matamoros se "transportó" al "viejo continente", específicamente a Inglaterra.
Los encargados de interpretar esta adaptación de la novela de Susan Hill, fueron "el maestro del terror", Rafael Perrín, y Ernesto D' Alessio.
Ambos van desentrañando el pasado de un vendedor de una agencia de seguros, Arthur Kipps, para conocer el motivo de su tormento.
Con la ayuda del director de escena John Morris, Kipps le da "vida" a la historia de su juventud que él mismo escribió, para presentarla a sus familiares y amigos.
Por dos horas, un público, en su mayor parte taciturno y atento, conoce también a aquel ente y la maldición que trae consigo.
Los diálogos de Rafael y Ernesto en ocasiones provocan risas, que bien podrían ser como una respuesta biológica de autodefensa por el miedo que se llega a percibir de repente.
Los efectos especiales de sonidos, luces y la niebla, aumentaron el terror de cada espectador, que esperaba en alerta el siguiente acto.
ANIVERSARIO
Rafael Perrín agradeció y bendijo a Torreón, como es costumbre, por darse cita este miércoles. Además, por el 30 aniversario de la obra, rememoró que la estrenó un 17 de febrero de 1994 al lado del primer actor Germán Robles en el Teatro Arlequín; asimismo, recordó con cariño esta ciudad, Torreón, ya que fue el primer lugar al que fueron de gira.
El público lagunero pasó del miedo a la admiración, porque reconocieron el trabajo realizado esa velada con fuertes aplausos y, la mayoría, ovacionaron a Perrín y D' Alessio de pie.
