'Utilizar Afores no reclamadas es insuficiente para garantizar pensiones', asegura Francisco Miguel Aguirre

Utilizar los ahorros en las afores de los trabajadores que no hayan sido reclamados, sería insuficiente para garantizar una pensión del 100 por ciento del último salario a quienes ganen menos del sueldo promedio de cotización en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), que en 2023 fue de 16 mil 777 pesos al mes, señaló el director y fundador de Valuaciones Actuariales del Norte (VAN), Francisco Miguel Aguirre Farías.

Explicó que no se trata de los 64 o 70 mil millones de pesos que buscan encontrar en este momento, sino de la proyección a 50 años cuyo, costo asciende a los 7 billones de pesos, tomando como base el valor que en este momento tiene la moneda; es decir, se estaría aportando menos del 1 por ciento de lo que se requiere en 50 años para hacer frente a este compromiso.

El especialista aclaró que el trabajo de los actuarios es precisar cuánto valen las pensiones y cuánto pueden llegar a costar en un futuro, pero nunca juzgarlas: “Todos estamos de acuerdo, y yo lo he dicho desde hace muchísimos años, que debemos buscar las opciones para apoyar a la gente que tiene solamente la pensión del adulto mayor y también quienes están en el IMSS y en el ISSSTE con cuentas individuales, en eso coincidimos absolutamente y nuestro trabajo es ver cuánto cuesta ese apoyo para que los tomadores de decisiones lo hagan con una mayor información”.

La propuesta legislativa, impulsada por los diputados Ignacio Mier Velazco e Ivonne Cisneros, busca apoyar las iniciativas presidenciales para mejorar las pensiones, sin embargo, la controversia y el tema polémico radica en la utilización de recursos de cuentas individuales inactivas de trabajadores mayores.

“En este sentido lo primero es señalar que la iniciativa no precisa tomar estrictamente los recursos de las cuentas inactivas, sin embargo, los diputados de MORENA aseguraron que lo van a plantear, que lo van a modificar y que se agregará como parte de las discusiones, aunque en este momento, no se plantea así”, indicó.

Recordó que la ley actual señala que, en el caso del ISSSTE, el dinero de las cuentas individuales que no se reclaman prescribe en un plazo de 10 años y se toman para fondear las pensiones de las personas adheridas a este sistema, e igualmente ocurre con el IMSS.

“Cómo yo lo entiendo y desde mi punto de vista -aunque hay que precisar que esto es muy reciente y que apenas salió el miércoles-, no se estaría afectando a los trabajadores porque también se está previendo que se crearía un fondo para que, sí alguno de estos trabajadores o de sus beneficiarios mayores de 70 ó 75 años llegaran a reclamar, se les entreguen sus recursos”, indicó.

“Yo lo que pensaría es que el gobierno debe dejar muy claro cual va a ser ese procedimiento, y debe ser un procedimiento muy sencillo y ágil, para que estas personas de quienes se haya utilizado su dinero tengan posibilidad de reclamarlo, en caso de ser necesario”.

El coahuilense y actuario consultor del Banco Interamericano de Desarrollo, del Banco de México, del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), de la Organización Nacional de Instituciones Estatales de Seguridad Social (ONIESS), de la Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES), así como de Institutos Estatales de Seguridad Social, de más de 30 universidades públicas, municipios y de diversos grupos empresariales, aclaró que aun tomando estos recursos no se completa para la pensión que propone el Presidente.

“Los primeros años costaría 2 mil, 4 mil, 5 mil millones, luego para el año sexto andaría en unos 20 mil millones, pero en el largo plazo, más o menos unos 30 años, ya estaríamos hablando de 600 mil millones y el valor presente del gasto que generaría esta pensión sería de 7 billones de pesos; lo importante es comparar los 64 ó 70 mil millones que están tratando de buscar, contra los 7 billones que podría representar”, concluyó.