El proyecto se avaló por 451 votos a favor.
El pleno de la Cámara de Diputados aprobó por unanimidad una reforma que busca regular a los centros de recuperación de adicciones que no son parte del gobierno, mejor conocidos como granjas o anexos.
El proyecto se avaló por 451 votos a favor y obliga a estos establecimientos a contar con un certificado sanitario para operar.
En la argumentación de la iniciativa, el diputado del PVEM Marco Antonio Natale Gutiérrez expuso que a lo largo de los años se han buscado acciones para combatir las adicciones; "sin embargo, las sustancias adictivas se han vuelto accesibles para la población en general", indicó.
El legislador explicó que se ha atendido a más de 100 mil personas en centros de adicciones gubernamentales, pero detalló que en el caso de los sitios externos estos no siempre lo hacen adecuadamente.