Yamilet denuncia violencia vicaria, espera recuperar a su hijo que no ha visto en tres años
Yamilet Meraz enfrenta, desde hace tres años, violencia vicaria, un tipo de violencia estructural en la que los agresores utilizan a los hijos como instrumentos para ejercer control y daño emocional sobre la madre.
Su calvario comenzó cuando su expareja, un hombre 20 años mayor que ella, que dice, tiene un historial criminal, la acusó falsamente de "retención" y "sustracción" de su propio hijo. Con el apoyo de la Fiscalía del Estado de Durango, que, según Yamilet, favoreció al agresor, las autoridades intervinieron en su vida de manera violenta.
En el momento de su detención, Yamilet narra, tenía siete meses de embarazo de su segundo hijo, eso no impidió que fuera golpeada por la policía, lo que le ocasionó una amenaza de aborto.
A pesar de que los médicos legistas confirmaron su delicada situación de salud, la Fiscalía insistió en que debía seguir enfrentando el proceso, acusándola de haber "robado" a su hijo.
Durante su detención, Yamilet sufrió una serie de agresiones físicas y psicológicas, mientras, asegura, la justicia se plegaba a intereses ajenos al bienestar de ella y de su hijo.
Los intentos de meterla a la cárcel han sido varios, en total, indicó, se han emitido tres órdenes de aprehensión en su contra: dos provenientes de Gómez Palacio y una del Estado de Durango, lo que ha creado un clima de constante persecución y hostilidad hacia ella.
“Durante tres años he tenido que estar luchando, y manifestándome de diferentes maneras, debido a que a mi agresor lo apoya la fiscal Sonia Yadira y el presidente del tribunal”.
A la fecha, refiere que ella tiene la custodia legal de su menor hijo y que existe un amparo ganado.
“En ese amparo le ordenan al Juez Tercero de lo Familiar de Gómez Palacio que me entregue a mi hijo y no lo ha hecho, ese amparo es del 2022”.
Por el motivo anterior, detalló, hace tres días un Juez de distrito multó al Juez Tercero de lo Familiar por 108 mil pesos. Lo que sigue, entonces, dice, es que le entregue a su hijo, si no lo hace, explicó, seguiría la destitución del Juez y después la cárcel.
Nulo apoyo de las autoridades
“Llevo tres años luchando contra el poder judicial y la fiscalía yo sola”.
A pesar de que Yamilet ha recurrido a diversas instancias de apoyo, la respuesta de las autoridades ha sido fría y distante.
El gobernador del Estado de Durango, Esteban Villegas, dice Yamilet, ha manifestado en múltiples ocasiones su preocupación por la violencia contra las mujeres, sin embargo, reclamó, nunca ha respondido a ninguno de sus llamados.
Además, argumenta que la fiscal Sonia Yadira, quien está a cargo de las investigaciones de su caso, ha sido una de las figuras clave en la persecución.
Según la víctima, la fiscal ha sido la principal responsable de seguir fabricando denuncias falsas en su contra, lo que ha prolongado aún el sufrimiento por no poder ver a su hijo.
Actualmente, Yamilet no tiene contacto alguno con su hijo Leonel. La última vez que estuvo con él, el niño tenía solo un año y nueve meses, ahora, a sus cinco años, está bajo la custodia de su padre, en Santa María del Oro, Durango.
Yamilet desconoce el estado emocional y físico de su hijo, a quien no puede ver ni comunicarse con él debido a la negativa judicial.
Por último, la madre hizo un llamado urgente a la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ha mostrado su apoyo a las mujeres víctimas de violencia de género, para que se involucre directamente en su caso.
Solicita que su situación sea escuchada y que se le garantice la restitución inmediata de su hijo, tal como lo establece la ley.