">">">">">

EDITORIAL Columnas editorial Caricatura editorial

Columnas

Jaque Mate

Ahora, exentos

SERGIO SARMIENTO

"Los empleos y las fábricas regresarán rugiendo a nuestro país, y ustedes ven cómo ya está ocurriendo". —Donald Trump, 2 de abril de 2025, "día de la liberación".

Una vez más Donald Trump se echó para atrás en un grupo de aranceles que había decretado previamente. Esta decisión evitó meter en problemas serios a algunas de las empresas más importantes de Estados Unidos, pero en vez de generar certidumbre y optimismo, la medida ha reiterado lo volátil de un presidente que gobierna con ocurrencias.

Este viernes 11 de abril por la tarde el Departamento de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) de Estados Unidos anunció "exclusiones" al pago de aranceles para una serie de productos electrónicos, como teléfonos inteligentes, módems, enrutadores y otros. La importación de estos productos no quedó completamente libre de aranceles. A China, por ejemplo, se le mantuvo un gravamen de 20 por ciento como "castigo" por su supuesto papel en el tráfico de fentanilo. Sí se eximió a estos productos de los aranceles "recíprocos", que no eran recíprocos, de 10 por ciento que habían quedado después de una pausa de 90 días a los cobros adicionales anunciada el 9 de abril. Trump ha levantado, por lo menos temporalmente, la sentencia que pesaba contra algunas importantes empresas estadounidenses, como Apple.

En la escalada de aranceles previa, Trump había ordenado que los productos chinos pagaran un imposible impuesto de 145 por ciento. Apple produce la mayor parte de sus iPhones en China. En los últimos tiempos ha venido trasladando una parte de esa producción a la India, pero también este país enfrentaba un arancel de 26 por ciento. Con la pausa de 90 días anunciada del 9 de abril y la exclusión de electrónicos del 11 ha cambiado de manera radical el panorama. El problema con Trump, sin embargo, es que no se sabe cuánto tiempo durará esta tregua.

Apple produce unos 220 o 230 millones de iPhones al año, de los cuales vende una tercera parte en Estados Unidos. En el primer trimestre de 2025 el iPhone representó el 55.6 por ciento de sus ventas totales. La empresa fabricó 22 millones de estos teléfonos en la India en el último año, pero tiene en marcha un proyecto para elevar la cifra a 30 millones anuales. Apple, por otra parte, realiza el 17 por ciento de sus ventas en China, por lo que no puede simplemente deslindarse de ese mercado.

Desde su primer período de gobierno Trump ha estado presionando a Apple para que mude su producción a Estados Unidos. Los ejecutivos de la empresa, incluido Tim Cook, el director ejecutivo, han argumentado que esto es imposible, y no por los sueldos en China, que ya no son tan bajos, sino por las dificultades para conseguir el número necesario de ingenieros, trabajadores especializados y proveedores para la producción. Trump ha presumido que Apple va a realizar inversiones por 500 mil millones de dólares en Estados Unidos, pero estas, contempladas para cuatro años, se enfocarán en una planta de servidores en Texas, una expansión del Fondo de Manufacturas Avanzadas, una academia de ingeniería en Michigan y un programa de investigación en campos experimentales, como la ingeniería de silicio. No hay planes para llevar a Estados Unidos la producción de teléfonos inteligentes u otros dispositivos de producción masiva.

Ningún político puede tomar las decisiones de producción de una empresa sin causar enormes daños. Una de las razones por las que Apple se ha convertido en la compañía más valiosa del mundo es su capacidad para producir con eficiencia. Reubicar todas sus operaciones en Estados Unidos generaría una enorme pérdida de valor ya que sus productos se volverían demasiado caros para el mercado.

Trump se ha echado para atrás en algunas de sus decisiones más dañinas. El problema es que no sabemos qué se le pueda ocurrir ahora.

ESTATISTAS

Sheinbaum quiere que Birmex fabrique medicamentos, aunque no ha podido comprarlos adecuadamente. También busca que el gobierno distribuya chocolates y frijol. Es como Trump, que quiere ordenarle a Apple dónde fabricar sus productos.

Leer más de EDITORIAL / Siglo plus

Escrito en: Jaque Mate columnas editorial Sergio Sarmiento

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 2376623

YouTube Facebook Twitter Instagram TikTok

elsiglo.mx