Cae ‘El Mayo’; narcoguerra en Sinaloa
El inesperado arresto en Estados Unidos del capo de capos del Cártel de Sinaloa, Ismael ‘El Mayo’ Zambada, provocó una ola de violencia sin precedentes en Sinaloa, principalmente en su capital Culiacán, así como en el puerto de Mazatlán, Eldorado y Badiraguato.
La caída del capo más buscado de México sucedió, de acuerdo con informes del Gobierno de México, por una traición dentro de la cúpula de la organización criminal.
Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, otrora líder del Cártel de Sinaloa, y hermano de Ovidio Guzmán uno de los líderes de la facción de “Los Chapitos” o “Los Menores”, habría llevado con engaños a “El Mayo” a una avioneta que terminó aterrizando en el aeropuerto de Santa Teresa en Nuevo México, un poblado de poco más de seis mil habitantes cercano a la ciudad de El Paso, Texas, donde fue abordado por agentes del FBI y la DEA.
Su detención pareció dictar el final de más de cinco décadas de carrera criminal. No obstante, uno de los capítulos más oscuros en la historia de Sinaloa estaban por comenzar a suscitarse. Cinco horas después de su detención en Estados Unidos, la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sinaloa informó del asesinato de Héctor Cuén, exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa y diputado local electo.
Semanas después se confirmó que los hechos estuvieron vinculados y se dio a conocer que el gobernador morenista Rubén Rocha Moya se encontraba en Estados Unidos al momento de los sucesos.
Posteriormente inició una narcoguerra entre las facciones de “El Mayo” y “Los Chapitos” por el control del Cártel de Sinaloa. A inicios de diciembre las muertes violentas superaban las 600 y las desapariciones se contabilizan, al menos en cifras oficiales, en más de 900.
Actualmente, el Gobierno federal ha emprendido acciones para mitigar la violencia que se vive en la entidad del Pacífico, sin embargo, no se han presentado resultados. Mientras tanto, “El Mayo” Zambada espera iniciar su juicio en su contra en una Corte Federal en Nueva York, mientras que se desconoce los alcances legales que enfrentará su ahijado, Joaquín Guzmán López.
De esto, se presume que el hijo de “El Chapo” busca beneficios para él, su padre y hermano, sin embargo estas versiones no han sido confirmadas por autoridades de Estados Unidos, mismas que han guardado silencio en la información solicitada por México sobre los hechos de la detención del capo de capos del Cártel de Sinaloa.
Osiel Cárdenas regresa a México
El exlíder del Cártel del Golfo y fundador del grupo delictivo Los Zetas, Osiel Cárdenas Guillén, regresó a México para enfrentar cuatro procesos federales en su contra.
Su deportación se dio a mediados de diciembre después de que el Sistema Penitenciario de Estados Unidos informara de su liberación el 31 de agosto de este 2024, esto tras cumplir una sentencia reducida por “buen comportamiento”. Cárdenas Guillen, de 57 años y quien enfrenta varias acusaciones en México, pasó el 3 de septiembre de una cárcel en Indiana a estar bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés), a la espera de ser entregado a su país.
Fue uno de los capos más buscados en México y recibió en 2010 una condena de 25 años de cárcel en una corte de Texas, aunque solo cumplió el 75% de su sentencia.
El líder criminal se declaró culpable de cinco cargos relacionados con narcotráfico mediante un acuerdo con la Fiscalía, que le retiró otros12 cargos que le habrían implicado cadena perpetua.
Según la acusación del Departamento de Justicia de Estados Unidos, en su momento de mayor apogeo la organización encabezada por Cárdenas Guillén realizaba actividades de narcotráfico en Houston, Chicago y Atlanta.
Conocido bajo el alias ‘el Ingeniero’, quedó detenido en México en 2003 y fue extraditado a Estados Unidos en 2007 junto con otros tres narcotraficantes mexicanos.
Osiel Cárdenas Junior, el hijo de Cárdenas Guillén, también recibió una condena el año pasado a pasar más de nueve años de cárcel por contrabando de armas a México.
Narcominas de cárteles inundan Michoacán
La sierra que une a los municipios de Aguililla, Tepalcatepec, Buenavista Tomatlán, Los Reyes, Coalcomán y Cotija es una zona minada por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Michoacán.
En las brechas de esta región colindante con el estado de Jalisco el grupo criminal encabezado por el michoacano Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, sembró centenares de explosivos terrestres para evitar el ingreso de sus rivales y de las fuerzas de seguridad.
Se trata de un extenso y sinuoso territorio sin caminos, puras brechas, por el que el Cártel Jalisco Nueva Generación se moviliza entre municipios y donde tiene campamentos, narcolaboratorios y bases de operaciones, según fuentes del gabinete de seguridad.
Esta franja minada comunica a Cotija con Tepalcatepec, a través de la comunidad de Santa María del Oro. También se puede llegar de Cotija a Buenavista Tomatlán, y de ahí al municipio de Aguililla y Coalcomán, por la comunidad de Paredes del Ahogado, donde hace unos días murieron dos militares por la explosión de una “narcomina”.
La localidad de Tazumbos, donde se encuentra el Centro Federal de Readaptación Social número 17, “CPS Michoacán”, conecta con la conocida tenencia de La Ruana, y de ahí se puede trasladar a la comunidad de Punta de Agua, en Buenavista Tomatlán, donde actualmente hay una disputa entre la alianza CJNG-Los Viagras y Los Caballeros Templarios.
