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China ha declarado un estado de emergencia debido a un brote de Metapneumovirus humano (HMPV), un virus respiratorio altamente contagioso que afecta principalmente a niños, personas mayores y aquellos con sistemas inmunológicos comprometidos.
Este virus, que provoca síntomas como fiebre, tos y dificultad para respirar, ha colapsado los sistemas de salud, particularmente en las unidades pediátricas de las provincias de Zhejiang y Hunan. A este brote se suman otros virus respiratorios, como la influenza A y Mycoplasma pneumoniae, que están incrementando la presión sobre los hospitales.
Las autoridades han luchado por contener la propagación del HMPV, que ya ha llevado a la saturación de la atención médica. Las imágenes y testimonios de las zonas afectadas revelan la gravedad de la crisis, similar a la situación que vivió el país con la pandemia de Covid-19. A pesar de la crisis sanitaria, las autoridades chinas no han ofrecido detalles completos sobre la magnitud del brote.
La situación ha encendido nuevamente los temores sobre la capacidad de los sistemas de salud para enfrentar emergencias de salud pública a gran escala. Este brote también pone de relieve la vulnerabilidad de las infraestructuras médicas ante la propagación de enfermedades virales respiratorias.
