Foto (CORTESÍA)
Personal de la Dirección de Inspección y Verificación de Torreón colocó este jueves sellos de clausura en el restaurante “El Danubio” ubicado sobre el bulevar Carlos López Sosa de Los Viñedos y cuyo negocio está a cargo de los padres del coordinador del Partido del Trabajo (PT) en esta ciudad, Gerardo Enrique Calvillo Hernández.
La visita se hizo minutos después de las 10 de la mañana y se levantó el acta número 00261, turnándose a la autoridad competente para que se califique, determine y ejecute la sanción que en derecho corresponda.
La medida generó inconformidad en el coordinador quien acuso una presunta represión por parte del Municipio pues apenas el pasado martes, se había pronunciado a favor de las personas afectadas en la riña que se registró la madrugada del domingo 16 de marzo y en la cual fue involucrado el secretario del ayuntamiento, José Elías Ganem Guerrero. El coordinador, pidió al alcalde Román Cepeda tomar cartas en el asunto.
“Llegaron ellos ahí, argumentando que era una Inspección porque traían operativo pero en todos los operativos primero van, te revisan y si tienes alguna falta que todos los negocitos las tienen, te dan un lapso de tiempo para poder subsanarlo y te notifican. Ellos dijeron, no vinimos a notificar, si tienes algo te vamos a clausurar, ahí supimos que era un tema de represión política”, aseguró.
Entre las faltas que observaron los inspectores se encuentran que el extintor estaba caducado además de que el negocio tenía una botella de vino que utilizan para sazonar los platillos (especialmente piernas y pavos) que en ocasiones solicitan los comensales para algún evento social.
“Argumentaron ellos, alevosamente, que vendíamos alcohol sin permiso, lo cual es falso y no los sacamos de ahí, llevaban la consigna de cerrar, es una represión política, por lo que nosotros hacemos y lo que representamos, tienen actos de represión contra todo mundo para causar miedo”, sostuvo.
Calvillo Hernández, agregó que el acta que les entregaron no es legible y responsabilizó al presidente municipal así como el secretario del Ayuntamiento de lo que le ocurra a él y a su familia, pues el restaurante es un negocio de tradición y no habían tenido una situación similar, aunado a que sus padres son personas de la tercera edad y padecen enfermedades crónicas.
“Y obviamente se pusieron mal, entraron en crisis, en pánico porque ellos no se meten en problemas, son personas que casi llegan a los 70 años”, detalló.
Calvillo Hernández publicó un video para manifestar su inconformidad y hasta ahora, el gobierno municipal no se ha pronunciado al respecto.
