La asamblea feminista “Mujeres que luchan por mujeres” anunció a través de redes sociales la instalación formal del Grupo Interinstitucional y Multidisciplinario (GIM), el cual dará seguimiento a la investigación para determinar si en Coahuila se declara o no la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres.
La solicitud, cabe recordar, fue presentada por la misma asamblea desde el 15 de julio de 2024, ante el alarmante incremento de feminicidios, violencia familiar y embarazo adolescente en la entidad.
Sofía Díaz, vocera y representante legal de la asamblea, explicó en entrevista que el proceso de investigación arrancó oficialmente tras meses de retraso derivados de la transición institucional de INMUJERES y CONAVIM a la nueva Secretaría de Mujeres Federal.
“El proceso se ha visto retrasado debido al periodo de transición de estas dependencias, pero ya no podíamos esperar más. La ley es muy clara: una vez que se instala el GIM, los trabajos deben comenzar”, sostuvo.
La investigación que ahora se inicia tendrá una duración de 30 días naturales y está a cargo de un grupo conformado por expertas en derechos humanos y violencia de género (una coahuilense, una especialista de Ciudad de México y una experta de Yucatán), así como autoridades de los tres niveles de gobierno y las propias solicitantes.
“Vamos a entrevistar víctimas de violencia de género y también a mujeres que han sido revictimizadas por las autoridades estatales o municipales. Además, analizaremos expedientes y la estadística de la Fiscalía, porque hay una preocupación fuerte sobre la incorrecta clasificación de los delitos”, apuntó Díaz.
La importancia de este proceso, agregó, radica en que se trata del primero que se realiza bajo las nuevas disposiciones derivadas de la reforma a la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, aprobada en 2022.
A diferencia de procedimientos anteriores, en esta ocasión sí existen sanciones administrativas y penales para autoridades que no cumplan con las medidas que eventualmente se dicten.
“Eso cambia totalmente el panorama. Antes, aunque se declarara la alerta, los gobiernos podían omitir las recomendaciones sin consecuencias reales. Ahora ya no”, subrayó.
URGENCIAS INSTITUCIONALES Y LEGISLATIVAS
Una de las tensiones principales surgidas durante la instalación del GIM, reconoció Díaz, fue la presión por parte de la Secretaría de las Mujeres Estatal para postergar el inicio de los trabajos.
“Nosotras dijimos que no. El artículo 30 del reglamento de la Ley General de Acceso a una vida libre de Violencia es claro: se instala el grupo, se inician los trabajos. No podíamos permitir más dilaciones. Desde julio se presentó la solicitud y estamos a finales de abril”, dijo.
Además, alertó que el corto plazo para realizar la investigación podría obstaculizar la posibilidad de aplicar reformas legislativas urgentes, ya que el periodo ordinario del Congreso local concluye al finalizar abril.
“Muy probablemente se requerirán reformas legislativas. Pero si no se actúa ahora, habrá que esperar hasta septiembre. No podemos permitir que la burocracia vuelva a poner en pausa la vida de las mujeres”, advirtió.
POR QUÉ ES URGENTE LA ALERTA DE GÉNERO
El contexto de violencia que motivó la solicitud de Alerta de Género es alarmante. Coahuila ocupa el cuarto lugar nacional en violencia familiar y embarazo adolescente.
Durante 2024, varios de sus municipios han figurado de forma constante en el listado de los 100 más peligrosos para las mujeres, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
“Esto no es una exageración. Es una emergencia. Por eso se llama ‘alerta’. No es que vayan a militarizar las calles, como algunos piensan. Es un mecanismo que busca implementar acciones urgentes para que las mujeres podamos vivir seguras: en nuestras casas, en la calle, en todos los espacios”, explicó Díaz.
HACIA UNA RESOLUCIÓN DEFINITIVA
Una vez concluida la investigación, el 22 de mayo, será la Secretaría de Mujeres Federal, junto con la Secretaría de Gobernación, quienes decidirán si se declara oficialmente la Alerta de Género para el estado de Coahuila.
De ser así, implicaría la obligación de los tres niveles de gobierno de implementar medidas correctivas y estructurales, además de sancionar a quienes hayan sido omisos o negligentes en su deber de proteger a las mujeres.
“El mensaje es claro: las mujeres estamos vigilantes, informadas y organizadas. Este proceso es una oportunidad para demostrar que la ley se puede aplicar con seriedad, y que la vida de las mujeres importa. No queremos más promesas. Queremos justicia y garantías para vivir sin miedo”, concluyó Sofía Díaz.

Coahuila al filo de la Alerta de Género, investigación está a cargo de un grupo de expertas