
Cuando desaparece un hijo, desaparece el miedo: Luz López, tras asesinato de madre buscadora
La muerte de la buscadora Teresa González Murillo en la ciudad de Guadalajara, no despertó el temor entre las madres que mantienen la esperanza de encontrar a sus hijo, pues “cuando desaparece un hijo, desaparece el miedo”, dijo María de la Luz López Castruita, integrante del colectivo Voz que Clama Justicia por Personas Desaparecidas, de la región Laguna.
González, integrante del colectivo Luz de Esperanza, recibió un disparo en la cabeza tras resistirse a su secuestro por tres sujetos que había irrumpido en su hogar; después de varios días de luchar por su vida, falleció. Desde septiembre del 2024, Teresa emprendió la búsqueda de su hermano, desaparecido en la capital del país. Había sido amenazada en al menos tres ocasiones.
El hecho no ha despertado el miedo, no al menos en María de la Luz, pues es algo que dijo, que podría pasar desde que iniciaron sus labores de búsqueda.
“A mí no me causa temor porque como que lo traemos en la cabeza, que algo de eso nos puede pasar, pero yo siempre les digo cuando desaparece un hijo, desaparece el miedo, entonces creo que ni ella pudo sentir ese miedo”, dijo la madre buscadora.
Lucy, como la llaman sus compañeras del colectivo, busca a su hija Irma Claribel, desaparecida el 13 de agosto de 2008 cuando tenía 17 años de edad. Salió de casa con una maleta y llegó a la Central Caminera de Torreón, en donde se encontraría con una mujer que recién había conocido y que la había invitado presuntamente a un concierto con todos los gastos pagados en la ciudad de Saltillo; ese fue el último día que se le vio.
Razón por la que la madre buscadora, compartió que el miedo en ella ya no existe.
“Curiosamente nosotros como buscadoras, a menos hablando por mi, no siento miedo. Porque sé que puede pasar y que ahora le tocó a ella y nos dolió y nos dio coraje y nos da mucha rabia pero también sabemos que eso nos puede pasar a nosotros, pero eso no nos detiene pero dan más ganas de gritar y de alzar la voz”, recalcó.
Pero también aseguró que los colectivos no callarán. “No nos van a callar, sabemos que podemos quedar en esto, creo que es el sentir, de al menos de todas las mamás con las que yo convivo hemos hablado y que están en esta lucha”.
Pero también reconoció que hay madres que desean no hacer nada, hecho que respetan, pues es su sentir.