Luego de las quejas expuestas por los padres de familia del colegio “Mano Amiga” de Torreón, los directivos de ese plantel destituyeron al director, Salvador Martínez Sánchez Álvarez y nombraron a Julián Martínez Rodríguez, con quien esperan reunirse pronto para abordar las problemáticas del plantel.
El director general de la red de Colegios Mano Amiga en el país, Enrique Castañeda acudió a las instalaciones, ubicadas en la colonia Villas La Merced de esta ciudad y dio a conocer el cambio de directivo en la institución, además de que se anunció que se llevarán a cabo una serie de obras de rehabilitación y mejoramiento de las instalaciones.
Madres de familia que participaron en las manifestaciones que se llevaron a cabo en días pasados, dieron a conocer que no quitarán el dedo del renglón hasta que se atiendan todas sus inconformidades, pues si bien la destitución del director responde a una de sus exigencias, falta mucho por hacer y mejorar en beneficio de la educación de sus hijos.
“Nos mencionó que se van a invertir como tres millones de pesos en las mejoras, esperamos que así sea porque la escuela necesita mucha atención”, dijo una de las quejosas, tras señalar que desde hace por lo menos dos años la institución ha ido en decadencia, tanto en el aspecto material como en la labor de la enseñanza.
La destitución del director se hizo efectiva después de que los padres de familia señalaron que no ejercieron unos 65 mil pesos que, hace casi dos años, lograron reunir con distintas actividades para que se colocara cemento en los pasillos y accesos a las aulas de secundaria.
Entre las diferentes demandas, destacan la mejora general de las instalaciones, pues los baños están muy deteriorados al igual que las ventanas, techos y pisos de los salones de clase; también piden la instalación de aparatos de aire, pues en temporada de calor hay alumnos que sufren de golpes de calor, ya que algunas de las aulas solamente cuentan con abanicos de techo.
Las instalaciones eléctricas, los patios o canchas deportivas, entre otras requieren de un mejoramiento profundo.
En cuanto al tema académico, los padres de familia indicaron que es otro punto que esperan abordar pronto con el nuevo director, pues aunque se nombraron algunos de los maestros que faltaban en niveles como preparatoria, consideran que no tienen la preparación adecuada para las clases que les asignaron.
“A una maestra le asignaron Matemáticas pero es licenciada en Biología”, citó una de las madres de familia como ejemplo.
Los colegios Mano Amiga son católicos, atienden a casi 13 mil alumnos de bajos recursos en todos el país en un total de 21 planteles y según la información que ofrece la Red en su página web, el 85 por ciento de sus alumnos continúan sus estudios.