La La Land (2016).
“Nunca había pensado cómo iba a morir, pero morir en lugar de alguien que amo, me parece que vale la pena”, es la frase con la que inicia la narración con voz en off de Crepúsculo (2008, Catherine Hardwick), primera entrega de la franquicia de vampiros que impactó a toda una generación de adolescentes en la década inicial del milenio. La película se inspira en el libro homónimo de la autora estadounidense Stephanie Meyer. Esta saga es amada y odiada por múltiples razones, pero más allá del valor cinematográfico que pueda llegar a tener, ha sido criticada por el nivel de toxicidad que existe entre la pareja protagonista, conformada por Edward Cullen (Robert Pattinson) y Bella Swan (Kristen Stewart).
La cinta es un referente del amor para millones en el mundo, tanto así que la canción principal, "A thousand years", de Christina Perri, es una de las más usadas como vals por las parejas que contraen matrimonio. El tema central de Crepúsculo es la relación idealista que existe entre una mortal y un vampiro, quienes, sin importar los obstáculos, nos enseñan que uno siempre termina con la persona que ama, aunque en el proceso se sufra e incluso se llegue a perder la vida por el otro.
La franquicia muestra, dentro de su propio universo de hombres lobo y vampiros, una relación codependiente en la que el hombre es un ser misterioso que rechaza el amor y el contacto físico, y que además tiende a la manipulación, mientras que la adolescente se le entrega de manera sumisa. Este arco de desarrollo ha sido imitado en otras sagas que también pasaron del papel al cine, como Cincuenta sombras de Grey, de la autora E.L. James, cuyas cintas fueron protagonizadas por Jamie Dornan y Dakota Johnson; así como After, la cual surgió como un fanfiction del cantante Harry Styles escrito por Anna Todd en el sitio Wattpad, y que llegó a las salas de cine protagonizada por Josephine Langford y Hero Fiennes Tiffin, por mencionar algunas.
El amor ha sido plasmado de distintas maneras en la pantalla. Ya sea drama o comedia, no parece existir el cine sin el romance. Incluso las películas de géneros como el terror, la acción y la fantasía suelen presentar relaciones de pareja, que aunque no son el tema central de la cinta, sí son importantes para el desarrollo de esta. La fórmula es casi siempre la misma, principalmente en la comedia romántica: el chico conoce a la chica, la pierde, luego la recupera y el final es feliz, terminan juntos para siempre.
¿Qué tiene que ver Crepúsculo en todo esto? La respuesta es que está llena de referencias de otras historias de amor que han sido contadas una y otra vez. Es clara la inspiración que toma de obras literarias como Drácula, de Bram Stoker; de Romeo y Julieta, de William Shakespeare, y de Orgullo y prejuicio, de Jane Austen.
Pero la forma en que las personas se relacionan ha cambiado a lo largo de los años y el cine se ha convertido en un espejo de estas dinámicas de interacción. En contraste al mensaje que da la saga vampírica, la generación que creció viendo Crepúsculo es la que ha estandarizado otros estilos de amor y los ha colocado en el mapa: las relaciones abiertas, el poliamor y la apertura a la diversidad sexual. En retrospectiva, ha criticado los elementos más cuestionables de la franquicia, principalmente las carencias que vive Bella al ser una damisela en apuros con dependencia emocional hacia Edward.
Es por esto que cada día son más las películas que plantean el amor de distintas maneras. Si bien siempre es disfrutable ver una historia romántica con la fórmula tradicional, como Diario de una pasión (2004, Nick Cassavetes), Querido John (2010, Lasse Hallström) —ambas inspiradas en los libros de Nicholas Sparks—, Titanic (1997, James Cameron) o Un lugar llamado Notting Hill (1999, Roger Michell), no está de más explorar las nuevas opciones románticas en el cine actual, más diversificadas y que, además, plasman diferentes momentos de una relación. Hollywood nos había acostumbrado a ver siempre el final feliz, pero nunca lo que sigue después de la boda o lo complicado que es en ocasiones acostumbrarse a vivir junto a una pareja por mucho que se la ame, arreglar las diferencias o, incluso, aceptar que la relación no tiene futuro y hay que tomar rumbos distintos.
¿QUÉ SIGNIFICA AMAR?
Existen diferentes percepciones del amor. Para empezar, no sólo está el amor de pareja, sino también aquel que se desarrolla en la amistad, la familia o hacia uno mismo. Definirlo es probablemente una de las cuestiones de mayor trascendencia para el ser humano, y es que amores hay muchos.
La Real Academia Española lo define como: “Atracción sexual y emocional hacia una persona con quien se desea emprender una relación afectiva estable”. Y describe la sensación de querer como: “Sentimiento de intenso afecto e inclinación hacia alguien”.
“El amor no duele, duele todo lo que confundimos con amor”, es la frase que usa la cantante mexicana Danna Paola antes de interpretar “Amor ordinario” en cada concierto, un tema sobre desamor. O qué tal aquella frase de “Aceptamos el amor que creemos merecer”, que le dice el profesor a Charlie en Las ventajas de ser invisible (2012, Stephen Chbosky). Lo que queda claro es que se trata de un concepto ambiguo del que podríamos encontrar múltiples definiciones y que, al final del día, cada quien vive a su manera.
Miles de relatos de romance han sido contados en el cine. La mayoría tienen en común que brindan una visión idealizada de lo que todos esperamos vivir en una relación, donde se entrega todo por el otro. Podemos mencionar varios ejemplos que han destacado a lo largo de la historia, como las comedias románticas protagonizadas por Audrey Hepburn a finales de los años cincuenta, con clásicos como Love in the afternoon (1957, Billy Wilder) o la aclamada Breakfast at Tiffany’s (1961, Blake Edwards).
En la década de los noventa impactaron películas como Mujer bonita (1990, Garry Marshall), protagonizada por Julia Roberts, quien de hecho se convirtió en una figura estelar de la comedia romántica con La boda de mi mejor amigo (1997, P.J. Hogan) y Un lugar llamado Notting Hill (1999, Roger Michell). En el comienzo del siglo XXI surgieron otras estrellas de este género, como Rachel McAdams, Mandy Moore, Jennifer Lopez, Anne Hathaway y Kate Hudson.
En la actualidad, plataformas como Netflix continúan produciendo metrajes románticos, pero principalmente enfocados al público adolescente, con entregas como Amor de calendario (2020, John Whitesell), protagonizada por Emma Roberts —sobrina de Julia Roberts—; Corazones Malheridos (2022, Elizabeth Allen Rosenblum), con Sofia Carson, o De todos los chicos de los que me enamoré (2018, Susan Johnson), con Lana Condor como figura principal. Pero el cine contemporáneo también ha plasmado narrativas que muestran la otra cara del amor, desde un punto de partida más real y humano, en donde se sufre, los personajes se lastiman y no siempre se concibe un cuento de hadas con final feliz.
El nuevo cine expone, por ejemplo, cómo es una separación; lo que idealizamos de la pareja no era verdad y buscamos borrar de la memoria todo sobre ella. Existen varios ejemplos que han mostrado estos escenarios de mayor complejidad y, hasta cierto punto, más realistas, al menos desde la perspectiva de los directores y guionistas que se han atrevido a contar estos relatos.
AMOR EN LA ACTUALIDAD
San Valentín fue un sacerdote romano que vivió en el siglo III después de Cristo. La historia narra que auspiciaba matrimonios para soldados en secreto, a pesar de que el emperador Claudio II los había prohibido, pues consideraba que un soldado soltero tenía mejores cualidades para la guerra. Ante tal desafío, San Valentín fue arrestado y decapitado.
Fue en el año 496 cuando el papa Gelasio designó, en el calendario litúrgico católico, al 14 de febrero como la festividad de San Valentín. En tiempos modernos, la celebración se convirtió en el Día de los Enamorados o en el Día del Amor y la Amistad. Con motivo de esta fecha se enlistan algunas piezas cinematográficas que plantean alternativas del amor que disienten del típico cuento de Cenicienta. En su lugar, presentan realidades menos idealistas sobre lo que se suele esperar al amar a una pareja.
ETERNO RESPLANDOR DE UNA MENTE SIN RECUERDOS
Podemos tomar como punto de partida películas de principios de los años dos mil, que si bien eran cintas románticas, no se apegaban al formato tradicional. Probablemente Eterno resplandor de una mente sin recuerdos (2004, Michel Gondry), protagonizada por Kate Winslet y Jim Carrey, es uno de los primeros filmes que se hicieron muy populares entre el público a pesar de —o tal vez debido a ello— mostrar otra cara del amor en la gran pantalla.
Esta cinta analiza, a través de una narrativa no lineal, la naturaleza de la memoria y el amor romántico. Fue galardonada con el Oscar a Mejor Guion Original y además otorgó una nominación a Mejor Actriz para Winslet. Es considerada por muchos críticos como una de las de las mejores producciones cinematográficas del siglo XX.
La película reflexiona sobre el hecho de que el destino no se puede controlar y plantea una relación llena de complejidades entre sus protagonistas. La historia se centra en la ruptura de una pareja y explora con un tono de comedia, aunque en profundidad, los sentimientos humanos.
Joel (Carrey) se somete a un tratamiento para olvidar los recuerdos de Clementine (Winslet), su expareja; sin embargo, las emociones asociadas a ellos no se pueden controlar del todo y toman su curso. Se trata de una pareja con diferencias notorias en su carácter, lo que los lleva a tomar malas decisiones a lo largo de su romance, el cual exploramos desde la mente de Joel a través de los recuerdos que van siendo eliminados de su cerebro poco a poco, gracias a un experimento científico polémico. Podemos ver los mejores y los peores momentos de la relación, desde el enamoramiento hasta el desvanecimiento del amor.
El impacto de la cinta ha sido tal que recientemente Ariana Grande se inspiró en ella para el video musical de “We can’t be friends”, segundo sencillo de su álbum Eternal Sunshine, título que también tiene raíces en el largometraje.
EL DIARIO DE BRIDGET JONES
Aunque esta película, estrenada en el año 2001, tiene una fórmula de comedia más tradicional, también es una de las primeras que exploraron el romance desde otra perspectiva. La cinta está basada en el libro del mismo nombre escrito por Helen Fielding, que a su vez está inspirado en la célebre novela Orgullo y prejuicio, de Jane Austen. El diario de Bridget Jones es una versión moderna del clásico literario, lo que hace que le dé un toque crítico e irónico al romance que ocurre entre los personajes, colocando sobre la mesa y criticando a las dos opciones románticas de la protagonista, rompiendo así con la idealización que Bridget tenía de ellos.
Renée Zellweger interpreta a Bridget, Hugh Grant a Daniel Cleaver y Colin Firth a Mark Darcy. La película dirigida por Sharon Maguire nos presenta a Bridget Jones, una treintañera llena de complejos sobre su apariencia física cuya vida sentimental es un desastre. Su mayor ambición es adelgazar y encontrar el amor verdadero, aunque su vida se complica aún más cuando se encuentra en medio de un triángulo amoroso entre el peligroso y atractivo Daniel Cleaver y su amigo de la infancia Mark Darcy. Esta historia dio pie a toda una franquicia de cuatro películas.
VICKY CRISTINA BARCELONA
Dirigida por Woody Allen y estrenada en el año 2008, está protagonizada por Javier Bardem, Penélope Cruz, Rebecca Hall y Scarlett Johansson.
La cinta muestra cómo el amor se experimenta diferente en cada persona, porque depende de la mentalidad de quien vive el romance. La historia se centra en dos amigas estadounidenses (Hall y Johansson) que llegan a Barcelona, España, para pasar sus vacaciones en la casa de verano de un amigo. En una visita a una galería de arte, conocen a Juan Antonio (Bardem), un atractivo pintor que les ofrece un fin de semana lleno de arte, comida y sexo, pero la situación se vuelve complicada cuando regresa la exnovia del artista, María Elena, interpretada por Penélope Cruz, a quien cabe mencionar que la película le otorgó la posibilidad de ganar un Oscar como Mejor Actriz de Reparto.
DE AMOR Y OTRAS ADICCIONES
Protagonizada por Anne Hathaway y Jake Gyllenhaal, De amor y otras adicciones es una comedia romántica dirigida por Edward Zwick, basada en la novela de Jamie Reidy: Hard sell: the evolution of a Viagra salesman.
Cuenta la historia de Maggie Murdock (Hathaway), una mujer que no deja que nada ni nadie le ate en la vida. Por casualidad, durante una visita al médico conoce a Jamie Randall (Gyllenhaal), quien tiene un gran éxito entre las mujeres y dentro del campo de las ventas farmacéuticas. Es un representante de ventas que, a finales de los años noventa, se dedicó a distribuir el exitoso medicamento denominado viagra.
Poco después de ese encuentro, Maggie y Jamie terminan durmiendo juntos y su vínculo afectivo evoluciona por caminos que ninguno de los dos esperaba, dándose cuenta de que tienen algo más que atracción sexual el uno por el otro; se sienten influenciados por la droga del amor. Sin embargo, su relación se torna dramática al enfrentar la grave enfermedad de Maggie.
La película se estrenó en 2010 y aunque recibió críticas mixtas, obtuvo nominaciones importantes en los Globos de Oro en las categorías de Mejor Actor de Comedia o Musical para Jake y Mejor Actriz de Comedia o Musical para Anne.
AMIGOS CON DERECHOS
En esta comedia romántica protagonizada por Ashton Kutcher y Natalie Portman, dos amigos de toda la vida deciden llevar su amistad al siguiente nivel cuando acuerdan tener sexo; sin embargo, determinan que, para no arruinar su relación, esta se basará solamente en encuentros físicos, sin peleas, sin celos y ninguna clase de expectativa. El pacto es, básicamente, no enamorarse.
La cinta es dirigida por Iván Reitman y se estrenó en 2011. Fue duramente criticada en su momento, aunque destacó por su premisa transgresora al plantear una situación romántica completamente distinta a lo que se había visto en la gran pantalla con anterioridad.
AMIGOS CON BENEFICIOS
Esta es otra comedia romántica dirigida por Will Gluck, también estrenada en el año 2011. Está protagonizada por Mila Kunis, Justin Timberlake, Emma Stone y Patricia Clarkson. La historia se centra en Jamie (Kunis), una joven cazatalentos que convence a Dylan (Timberlake) de mudarse a trabajar a Nueva York como director artístico de la revista GQ. Los dos, en la soltería y atractivos, entablan una relación estrictamente sexual sin dejar de ser amigos. La situación no trae más que complicaciones.
BLUE VALENTINE
Ryan Gosling y Michelle Williams protagonizan esta dramática historia romántica, también conocida como Triste San Valentín, estrenada en 2010 y dirigida por Derek Cianfrance. El argumento se centra en Dean y Cindy, un matrimonio joven que lleva siete años y en el que tienen una hija en común. Con el tiempo, ella pierde el interés por su marido y él, intentando recuperar la pasión, le propone pasar una noche en un hotel temático. Allí se hospedan en la llamada “habitación del futuro”, donde recordarán cómo se conocieron, de qué manera se enamoraron y cómo es que su relación empezó a deteriorarse. La película le otorgó una nominación al Oscar a Michelle Williams como Mejor Actriz.
HISTORIA DE UN MATRIMONIO
Es un drama estadounidense de 2019, escrito y dirigido por Noah Baumbach. El largometraje está protagonizado por Scarlett Johansson y Adam Driver. En esta película, un director de teatro y una actriz luchan por superar su divorcio, el cual les lleva al extremo tanto en lo personal como en lo creativo, pues además tienen que aprender a convivir para lograr una estabilidad en la vida de su pequeño hijo.
Esta propuesta fue estrenada por Netflix y aclamada por la crítica especializada. Recibió seis nominaciones al Oscar, incluida la de Mejor Película.
LA LA LAND
El drama musical estadounidense de 2016, escrito y dirigido por Damien Chazelle, está protagonizado por Emma Stone y Ryan Gosling. Cuenta la historia de Mia, una empleada de una cafetería que aspira a ser actriz, y Sebastian, un pianista de jazz desempleado con grandes ambiciones. A pesar de sus diferencias y sus distintas personalidades, sus caminos acabarán cruzándose gracias a una serie de acontecimientos. Pero, ¿su destino es estar juntos? La película nos presenta una realidad cambiante que impacta la relación entre ellos y muestra cómo después de la vida en pareja cada quien vive su propia historia.
LLÁMAME POR TU NOMBRE
Es un drama romántico estrenado en 2017. Dirigida por Lucca Guadagnino y escrita por James Ivory, fue ganadora del Oscar a Mejor Guion Adaptado.
La cinta es protagonizada por Armie Hammer y Timothée Chalamet. Ambientada en el norte de Italia en 1983, narra el romance entre Elio Perlman, un adolescente de 17 años, y Oliver, el asistente de su padre, de 24 años. La película es un desfile de emociones y muestra el amor ingenuo e intenso de la juventud. Recibió cuatro nominaciones al premio Oscar y se ha convertido en un clásico moderno de amor de verano.
LA PEOR PERSONA DEL MUNDO
Es una trágica comedia en la que una joven lucha contra la indecisión mientras atraviesa las turbulentas aguas de su vida amorosa, que se balancea de una relación con un hombre más de una década mayor que ella a un noviazgo con alguien de su edad, a quien conoció cuando ninguno de los dos estaba soltero. Narra cuatro años en la vida de Julie (Renate Reinsve), una mujer con problemas en sus relaciones interpersonales y en su carrera profesional, que poco a poco la llevan a mirar la vida de una forma más realista. La película fue nominada a Mejor Película Internacional y Mejor Guion Original. Se estrenó en Noruega en 2021 y está dirigida por Joachim Trier.
MALCOLM Y MARIE
Es una cinta de 2021 protagonizada por Zendaya y John David Washington. Narra la historia de un cineasta que vuelve a casa con su novia después de celebrar el estreno de una película que espera se convierta en un gran éxito. Pero la noche da un giro cuando revelaciones sobre sus relaciones anteriores comienzan a aflorar y ponen a prueba la fuerza del amor entre ellos. Fue dirigida y producida por Sam Levinson, con quien Zendaya trabajó previamente en la serie de HBO Euphoria.
EL PODER DEL PERRO
Es un western moderno dirigido por Jane Campion que se basa en la novela del mismo nombre de Thomas Savage. Aunque la historia se centra en la relación problemática entre dos hermanos, Phil (Benedict Cumberbatch) y George Burbank (Jesse Plemons), también plantea una relación llena de homoerotismo entre Phil y Peter Gordon (Kodi Smit-McPhee), el hijo de la esposa de George, Rose Gordon (Kirsten Dunst). En la cinta se cuestiona la sexualidad, el machismo y la feminidad. Aunque no es propiamente un romance, es en cierta forma una antítesis del romance entre vaqueros que propuso Ang Lee en el año 2005 con la aclamada romántica Brokeback Mountain, conocida también como Secreto en la montaña.
HISTORIAS DE AMOR Y CAMBIOS SOCIALES
Como se ha mencionado en este texto, el amor tiene muchas definiciones. A lo largo de la historia se ha intentado explicar de manera científica, espiritual, filosófica o poética. Pero si algo queda claro es que el ser humano siempre busca la manera de amar y sentirse amado.
Si se indaga en el pasado, se descubrirán muchos textos que muestran romances de la vida real ocurridos al margen de las formas de amor hegemónico de su época. Cartas, noticias y otros registros son prueba de ello, como es el caso del matrimonio entre las españolas Marcela Gracia Ibeas y Elisa Sánchez Loriga, llevado a cabo en 1901, en La Coruña. Para lograrlo, tuvieron que engañar a la sociedad: Elisa se hizo pasar por hombre.
Este tipo de relatos alimentan a otros ficticios que nacen en la mente de los enamorados, a través de la literatura, la música o el cine, dejando evidencia sobre las formas de amar de cada generación, ya sea un tema clásico de Juan Gabriel o Dolly Parton, o uno actual de Bad Bunny o Taylor Swift.
En el séptimo arte, las historias de amor seguirán evolucionando de acuerdo a las transformaciones culturales de cada tiempo y lugar, siempre un tema presente en la gran pantalla mientras los humanos sigan siendo seres sociales. La naturaleza de nuestra especie consiste en comunicarnos de forma más amplia que cualquier otra criatura en el mundo, y eso deriva en relaciones igualmente complejas. Es posible, incluso, que las nuevas historias de amor se desarrollen entre personas e inteligencias artificiales, como ya se vio en la cinta Her (2013), de Spike Jonze, donde el protagonista Theodore Twombly (Joaquin Phoenix) desarrolla un apego insano con un sistema operativo llamado Samantha.
No importa si es al estilo del clásico Hollywood con comedias románticas protagonizadas por Julia Roberts y Jennifer Aniston, o a través del cine contemporáneo que explora el amor desde nuevas perspectivas con estrellas como Zendaya y Timothée Chalamet, las historias de amor siempre seguirán presentes en las narrativas cinematográficas.