Todo listo para que este domingo 9, en el Caesars Súperdome de Nueva Orléans, se lleve a cabo el partido que prácticamente paraliza a toda una nación y a muchas partes del mundo, y hasta donde parece que nuestro planeta deja de girar en ese día, porque el Súper Tazón es un espectáculo sin precedentes que reúne a familias y amigos donde mejor se disfrute.
Hace poco menos de dos años, las Águilas vieron cómo los Jefes los despojaron de lo más sublime en la NFL, por lo cual, Kansas City empezó el camino para poder convertirse en el único equipo en la historia de los Súper Bowl en ganar tres anillos de manera consecutiva, ya que, antes de la amalgama entre la NFL y la AFL, lo que dio origen al partido que hoy conocemos como los Súper Tazones, hubo otra franquicia que consiguió ganar el campeonato tres años de manera seguida: los Empacadores de Green Bay, quienes obtuvieron este hito en el trienio que comprendió los años desde 1929 a 1931, y lo volvió a repetir en las temporadas de 1965, 1966 y 1967, siendo estas dos últimas fechas, las del Super Bowl I y Super Bowl II.
Patrick Mahomes ya es una leyenda de la NFL, pero además, quiere dejar su marca en la cronología de este apasionante deporte, haciendo algo que nadie más ha hecho, y aunque tendrá enfrente un rival que llega en el mejor momento de la temporada y con una plantilla construida para estar en este mismo lugar, eso es lo que tiene que superar para dejar su legado en futbol americano profesional.
Es indudable que, lo que ha de pasar por la mente de los jugadores de Filadelfia, quienes estuvieron hace dos años en la edición LVII, debe ser la palabra venganza, deportivamente hablando, ha de ser lo primero que les llega a las neuronas y es ese juicio que viene cargado de impresiones y que implica una segunda oportunidad para rectificar algunos de los errores que se han cometido en el pasado, porque, en el mundo del deporte, la revancha no se trata sólo de ganar la prueba en la que estás participando, sino que aquí, el desquite es, en esencia, una metáfora de la vida misma.
Cada ser humano, en algún momento, percibe la necesidad de evidenciar su valía o de subsanar el rumbo después de una derrota, y esto es algo que Nick Sirianni ha tenido que aprender forzosamente, recibiendo muchas críticas después de que su equipo saliese derrotado en aquel partido del 12 de febrero de 2023, disputado en Arizona, por lo que ahora, el entrenador en jefe de las Águilas supo reactivarse después de que en el curso pasado sufriera con un final de temporada muy deficiente para los estándares que busca Howie Roseman, gerente general de la organización de Filadelfia.
Al otro lado tenemos a la franquicia que nadie se quiere enfrentar en partidos a vida o muerte, ya que desde 2019, sólo han habido dos conjuntos capaces de arrebatarles la posibilidad del anillo, siendo primero los Bucaneros con Tom Brady ya en el curso de 2020, y después, los Bengalíes al mando de Joe Burrow en la final de conferencia de la temporada de 2021.
El resto de equipos que se han visto las caras con ellos en playoffs, han sido incapaces de apartar a los de Andy Reid de levantar el trofeo Vince Lombardi, ya que Kansas City maneja como nadie los tiempos de juego y se mueven de manera excepcional en los momentos difíciles, y tienen la experiencia y el talento para salir de cualquier situación crítica.
Y ya sólo nos queda hacer la cuenta regresiva de aquí al próximo domingo, en punto de las 17:00 horas, para poder disfrutar de este espectáculo sin precedentes en la vida del deporte.
