Se terminó el calendario regular de la temporada 2024-25 de la NFL y ya podemos dejar atrás todo lo sucedido y pensar en los playoffs que están a punto de comenzar, con los 14 mejores equipos de la liga que ya están listos para dar la campanada, y de aquí al 9 de febrero en Nueva Orleans, donde conoceremos quién se ha ganado el derecho a levantar el Trofeo Lombardi, al final del Super Bowl LIX.
Sabemos que los Jefes han estado pensando en hacer historia, ya que esperan convertirse en el primer equipo en ganar tres Super Tazones de manera consecutiva, sin embargo, para ellos sí podemos decir que es un enigma, ya que el camino hacia esa meta elevada, es tan arduo como lo ha sido en la memoria reciente, porque la AFC incluye dos equipos que tienen mariscales de campo con fuertes argumentos para ser el Jugador Más Valioso de la liga (Josh Allen, de Buffalo y Lamar Jackson, de Baltimore), y dos entrenadores principales que han ganado Super Bowls (Sean Payton, de Denver y Mike Tomlin, de Pittsburgh) y otro entrenador que ha tenido éxito en todos los lugares en los que ha estado (Jim Harbaugh de los Cargadores de Los Ángeles). Mientras que la NFC es aún más alucinante, ya que hay un puñado de equipos allí que tienen una oportunidad real de ganar un campeonato.
Y hasta el domingo pasado por la noche, tuvimos qué esperar quién quedaba sembrado con la posición de honor en la NFC, porque las dudas sobre la viabilidad de los Leones para ganar un campeonato terminaron con la victoria del equipo de Dan Campbell sobre Minnesota, en el cual, Detroit no sólo aseguró el primer puesto en la Conferencia Nacional y el título de la división norte, sino que enviaron un mensaje a toda la liga de que es una tontería subestimarlos cuando están abajo.
Este es un equipo que ha dependido de una ofensiva potente durante todo el año, una que lidera la liga en anotaciones y cuenta con muchas armas, y lo que los Leones revelaron el domingo por la noche, es que su defensa todavía puede cumplir en momentos críticos acosando al mariscal de campo de los Vikingos Sam Darnold todo el partido, y usaron una cobertura pegajosa para frustrar a los receptores abiertos Justin Jefferson y Jordan Addison. Se suponía que la defensa era la principal incógnita sobre Detroit, ya que todavía tienen jugadores de dos dígitos en ese lado del futbol en la reserva de lesionados, pero esa victoria del domingo fue otro ejemplo más de lo dura que puede ser esta organización cuando las probabilidades no están a su favor y con un entrenador en jefe que ha predicado coraje desde que entró en esa franquicia hace cuatro años.
Todo comienza este próximo sábado 11 en el NRG Stadium de Houston, con los Texanos recibiendo a los Cargadores, y más tarde en el M&T Stadium de Baltimore, los Cuervos le hacen los honores a los Acereros, mientras que para el domingo 12, en la “Congeladora”, los Bills se miden ante los Broncos y ya por allí de las 3 de la tarde, las Águilas reciben a los Empacadores, y a las 7 de la tarde-noche en la bahía de Tampa, los Comandantes de Washington estarán chocando con los Bucaneros. El lunes 13, se termina esta ronda de comodines en el Sofi Stadium de Los Ángeles, una vez que los Carneros se midan con los Vikingos.
¿Habrá algo mejor para este próximo fin de semana?
