En respuesta a la traición y crimen de Victoriano Huerta en contra del gran coahuilense don Francisco I. Madero González, el gobernador del estado, don Venustiano Carranza Garza, se dio a la tarea de promulgar el que fuera llamado "Plan de Guadalupe", un 26 de marzo del año de 1913, el Plan en cita lleva el nombre con el que es conocido, debido a que fue firmado en la Hacienda de Guadalupe, de la Hacienda de Ramos Arizpe, Coahuila, siendo en consecuencia un documento más que centenario y por su gran trascendencia, quienes vivimos y nacimos en este gran estado, nos sentimos más que orgullosos.
Debido a las acciones que Victoriano Huerta llevara a cabo antes y después de que ordenara la muerte del gran coahuilense, don Francisco I. Madero, tal y como el telegrama que les enviara a los gobernadores de México, notificándoles que asumía el poder ejecutivo, el poder legislativo del estado de Coahuila, mediante el decreto número 1421, desconoció el gobierno del general Victoriano Huerta, dándole poder y autorización a don Venustiano Carranza, para que conformara un ejército, para el efecto de que se restituyera el orden constitucional, el cual se había quebrantado al asesinar al legítimo presidente de la República.
El 26 de marzo, después de haber realizado una histórica convocatoria, se reunieron en la Hacienda de Guadalupe 70 jefes y oficiales constitucionalistas, representantes de todo el país, firmándose el 26 de marzo de 1913, destacando el hecho de que en la ciudad norteamericana Eagle Pass, lo anterior se dio el 31 de marzo de 1913. El Plan contiene 7 artículos, organizándose el ejército constitucionalista, desconociéndose a Victoriano Huerta como presidente de la República y a los poderes legislativo y judicial de la federación y a los gobiernos de los estados, además de designar a Venustiano Carranza, jefe del ejército constitucionalista.
En el año de 1914, Carranza decretó unas reformas y adiciones al documento, del cual hoy celebramos un aniversario más, en los cuales se otorga facultades para legislar, es decir, expedir leyes, entre los principales personajes que firmaron el plan en cita, se encontraban Jacinto B. Treviño, Lucio Blanco, Cesáreo Castro, y Alfredo Breceda, entre otros más, destacando entre ellos el lagunero Salomé Hernández Borrego, quien participó en grandes combates con las tropas revolucionarias, siendo catalogado por Carranza como "el grito de guerra que lo más selecto de la juventud mexicana lanzó a los cuatro vientos del país, contra la inequidad triunfante", entre otras cosas.
Celebramos el Plan de Guadalupe por haber sido concebido por un grupo selecto de coahuilenses bajo la guía de Carranza.