Exhortan a fortalecer las medidas de vigilancia de los vehículos utilizados para distribuir gas LP
Desde Congreso del Estado, se exhortó a la Secretaría de Energía del gobierno federal para que fortalezca las medidas de vigilancia de los vehículos utilizados para distribuir gas LP, a fin de constatar que cumplan con los permisos y las condiciones de seguridad, operación y mantenimiento, previniendo riesgos que ponen en peligro a la ciudadanía.
Lo anterior fue presentado por el diputado Álvaro Moreira Valdés, a través de un Punto de Acuerdo que presentó en tribuna durante la última sesión.
El gas LP es un combustible indispensable en la vida de las y los mexicanos, siendo usado en casi todos los ámbitos como es el trabajo, la industria, el transporte y en diferentes labores cotidianas y del hogar, mencionó el legislador priista.
Reveló que de acuerdo con datos de la Encuesta Nacional sobre Consumo de Energéticos en Viviendas Particulares (ENCEVI 2018), este combustible se utiliza en el 79% de las viviendas del país, principalmente para la cocción, el calentamiento de alimentos, en equipos de calefacción, entre otros.
No obstante, indicó que aunque su uso está altamente arraigado en los hogares, se trata de una sustancia química peligrosa y extremadamente inflamable que, al fugarse, puede incendiarse con solo una chispa o flama, causando graves daños a las personas y las edificaciones.
Recordó que por seguridad, solo puede ser distribuido por empresas autorizadas que deben cumplir con estrictas medidas para garantizar el correcto abastecimiento a los tanques estacionarios, su distribución y venta.
Añadió que estas se rigen bajo la Norma Oficial Mexicana NOM-007-SESH-2010 que regula las condiciones de seguridad, operación y mantenimiento de los vehículos para su transporte y distribución.
“Pese a este marco, siguen presentes actividades ilegales como es el llamado picteleo, que es la práctica de rellenar tanques portátiles de gas LP, por medio de autotanques o unidades de reparto que representan un peligro al desconocerse las condiciones en que están los cilindros para cerciorase de que no haya fugas”, expuso.
Además, dijo que se debe considerar la falta de mantenimiento o malas condiciones de los vehículos de reparto como otro factor de riesgo.
Señaló que de acuerdo con datos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), de enero de 2003 a mayo de 2021 se registraron mil 354 accidentes con gas LP, principalmente en Ciudad de México, Estado de México, Jalisco y Puebla, donde el 11.5% de los accidentes sucedió en el autotransporte.
“Los siniestros relacionados con este combustible han aumentado su frecuencia en Coahuila, donde recientemente hubo tragedias relacionadas con fugas en los cilindros de gas LP como son intoxicaciones e incluso explosiones en viviendas con consecuencias fatales”, señaló.
Agregó que también se han presentado accidentes relacionados con vehículos de transporte que representan un grave riesgo a la población.
Subrayó que tan solo durante el pasado mes de diciembre, la capital fue escenario del incendio de una pipa de gas que obligó a realizar el cierre de vialidades principales, así como la evacuación de 36 personas de comercios y viviendas aledañas para salvaguardar su integridad ante el posible riesgo de una peligrosa explosión.
Aunado a lo anterior, precisó que este inició a causa de una falla mecánica en el motor del vehículo; afortunadamente y gracias al adecuado control y manejo de la crisis por parte de bomberos y protección civil se logró mitigar las consecuencias.
Mencionó que hace tan solo uno días (28 de enero) se presentó otra explosión y posterior incendio de una pipa de combustible a la altura del municipio de Nava, causando el cierre de la Carretera Federal 57 por siete horas.
Tras estos acontecimientos, comentó que la Subsecretaría de Protección Civil del Estado inició un exhaustivo operativo para revisar las unidades encargadas del transporte y la distribución de gas.
Aseveró que si bien este esfuerzo es importante, resulta relevante que la Secretaría de Energía, como autoridad encargada de la vigilancia de la Norma Oficial Mexicana, refuerce las medidas necesarias para verificar y, en su caso, sancionar, a las empresas que no cumplen con las condiciones de seguridad y mantenimiento de los vehículos que transportan, suministran y distribuyen este combustible a fin de prevenir y atender los siniestros que pudieran ocasionarse por su manejo.