La diputada Magaly Hernández Aguirre. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Exhortan a la Secretaria de Educación, a llevar a cabo acciones inmediatas, coordinadas y efectivas, basadas en criterios explícitos, para salvaguardar no solo la salud de las niñas, niños y jóvenes estudiantes ante las bajas temperaturas, sino también de todos los integrantes del sector educativo.
Lo anterior, considerando que la infraestructura en casi la totalidad de las escuelas en Coahuila es insuficiente para proteger su salud de los efectos adversos del frío.
Dicho Punto de Acuerdo lo presentó en tribuna la diputada Magaly Hernández Aguirre en sesión del Congreso del Estado.
Bajo este contexto, la legisladora morenista puntualizó que la infraestructura escolar en el estado es insuficiente para proteger a las niñas, niños y jóvenes de los riesgos que el frío extremo representa para su salud.
Además, indicó que los docentes, personal administrativo y las familias también enfrentan dificultades significativas, como el cuidado de sus hijos menores que justificadamente no asisten a clase debido a las bajas temperaturas.
Añadió que otros riesgos es el enfriamiento durante los traslados hacia sus escuelas y los peligros de accidentes viales provocados por condiciones climáticas adversas.
Resaltó que durante los periodos de frío intenso, es común observar un incremento en enfermedades respiratorias entre los menores, exacerbado por la falta de sistemas de calefacción en las aulas y de infraestructura adecuada para mitigar los efectos del clima.
“Es inaceptable que nuestras escuelas no cuenten con las condiciones necesarias para proteger a la comunidad educativa, dejando en claro que el frío extremo no solo amenaza la continuidad educativa, sino también la salud y seguridad de quienes conforman el sistema educativo”, subrayó.
Expuso que tan sólo durante el invierno del 2024, se registraron 182 casos de influenza estacional, de los cuales 7 derivaron en fallecimientos.
Aseveró que esta información se ve agravada por el hecho de que apenas el pasado 14 de enero ya ocurrió el primer caso de defunción documentado en Coahuila vinculado a los efectos del frío.
“Estas cifras no solo son números, sino representaciones de vidas humanas truncadas y familias devastadas. Ante este escenario, no podemos quedarnos de brazos cruzados, es responsabilidad de las autoridades actuar con celeridad y eficacia para evitar más tragedias”, advirtió.
Sostuvo que la infraestructura educativa en Coahuila, en la mayoría de los casos, carece de condiciones adecuadas para enfrentar las bajas temperaturas.
“Preocupa bastante que solo 4 de cada 10 escuelas tengan aire acondicionado. Las aulas, sin calefacción y ni protección suficiente contra las bajas temperaturas, se convierten en espacios de alto riesgo para niñas, niños y jóvenes que además de ejercer su derecho a la educación, deben hacerlo enfrentando los peligros de enfermedades respiratorias”, destacó,
Esta situación, mencionó que no solo afecta a los estudiantes, sino también al personal docente y administrativo, quienes, al acudir diariamente a sus labores, se exponen a las mismas condiciones adversas.
“La comunidad educativa, incluyendo a padres y madres de familia, docentes y administrativos, quieren respuestas contundentes y claras para todos, por parte de las autoridades. No podemos permitir que las bajas temperaturas afecten la salud y seguridad de nuestras niñas, niños, jóvenes y del personal educativo. Es nuestra responsabilidad como representantes garantizar que se implementen soluciones eficaces, como podría ser la adopción temporal de clases en línea y la provisión de insumos necesarios para enfrentar el frío extremo”, expuso.
Comentó que en Tamaulipas, por ejemplo, se estableció que si la temperatura desciende a cero grados o menos, las clases presenciales se suspenden y se adopta una modalidad virtual, garantizando así la continuidad educativa sin poner en riesgo la salud de los estudiantes.
Por su parte, en Nuevo León, aunque aún no se han hecho públicos criterios claros para suspender clases, ya se anunció que se activará la modalidad virtual.
Por lo anterior, resaltó que estas acciones demuestran que es posible actuar de manera preventiva, sin comprometer el derecho a la educación.
“Las autoridades tienen la obligación moral y legal de asumir sus responsabilidades con decisión y compromiso frente a la ola de frío que amenaza a nuestro estado. No evadiendo esa responsabilidad, trasladándosela a los padres”, sostuvo.
Destacó que implementar una transición a clases en línea no solo es posible, sino necesario, como lo han demostrado otros estados, que enfrentarán las mismas condiciones climáticas.
“Los padres de familia claman por respuestas claras y acciones concretas para proteger a sus hijos de los riesgos asociados a las temperaturas extremas. ¿Qué estamos esperando?”, cuestionó.
Recalcó que Coahuila debe actuar de manera inmediata, coordinada y efectiva para salvaguardar a toda la comunidad educativa.