Hace algunas décadas, las diferentes Instituciones Bancarias de la Comarca Lagunera, promovían y apoyaban el deporte preferido por sus empleados y funcionarios, que participaban en los diferentes torneos que se celebraban principalmente en la Unidad Deportiva de la ciudad de Torreón, Coahuila, esto, en lo que se refiere al Softbol y Futbol, aunque también se competía en otros escenarios y en otras disciplinas, como el volibol y el boliche.
Y fue precisamente de la desaparecida Liga Bancaria de Softbol, de donde surgió el personaje que hoy nos ocupa, quien con base en una enorme dedicación y empeño en querer sobresalir, aprendió paulatinamente a dominar el arte de lanzar una pelota blanda, como se le conoce a la esférica del softbol, hasta llegar a convertirse, porque sus logros así lo indican, en el mejor pitcher de esta disciplina, en la historia del softbol lagunero.
Nos referimos, desde luego, al mundialista gomezpalatino Francisco Javier “Supermán” Saucedo Castro, quien teniendo solamente la poca experiencia de su etapa como beisbolista de la categoría juvenil en su ciudad natal, bajo la dirección de “Chalío” Orona, inició la práctica del softbol, formando parte del equipo representativo de su centro de trabajo: el Banco Internacional del Norte, y que dirigía el entusiasta e inolvidable manejador Alfonso Marín Valenzuela, apoyado por su coach Juanito García López allá por el año de 1974, y en el que el popular “Panchito”, como lo llaman afectuosamente sus más cercanas amistades, francamente tenía muy poca participación, siendo utilizado esporádicamente como primera base, aunque, honestamente confiesa que, en esa etapa, sus compañeros formaban ya un equipo muy acoplado y tenían mejor nivel de juego que él. Pero fue esta última situación la que motivó a Saucedo a convertirse en lanzador y formar su propio equipo con algunos compañeros de la misma institución bancaria que difícilmente en su vida se habían puesto un guante o empuñado un bat. De esta manera nacía la leyenda de quien llegaría a convertirse en uno de los mejores pitchers de esta disciplina, hasta llegar a formar parte de la Selección Mexicana de Softbol que nos representó en varios torneos internacionales.
Cabe aclarar, que en aquella época destacaban valiosos elementos de los demás equipos que conformaban la Liga, entre los que se recuerda a algunos como: Sixto Älvarez, Gustavo Loera, Julio Reyes, y Javier Contreras con el equipo de Banco de México; Francisco Venegas, Raúl Rodarte, Daniel Serrato y Dionisio Ortega, con el Banco Sofimex; Los hermanos Paco y Esteban Balarezo, con el Club de Servicios Ejidales (S.E.S.A.); Julio Favela (otro mundialista lagunero), Carlos “Comino” Rodríguez, Esteban Burciaga,y Osvaldo Mascorro con el equipo de ANAGSA; el cañonero Gerardo Pérez, Beto Gutiérrez y Margarito Flores con el conjunto de Banamex, que dirigía el entusiasta David Guillén; y desde luego, el primer equipo del Banco Internacional del Norte, que se denominaba Bisa A, ( para diferenciarlo del Bisa B que recién había conformado Panchito Saucedo) y que contaba con jugadores de alto nivel como: Luis Carrillo, el ídolo de la afición de Parral, Chih.; Eduardo Torres Rojas, quien llegó a formar parte del equipo de Zacatecas, sucursal de Unión Laguna en la Liga Central, Luis Daniel “Ham” Flores, Roberto Serrato, Guillermo Orozco, y Francisco “López Tarso” Ibarra, entre otros, siempre con el valioso apoyo del Sr. Francisco Meléndez Valenzuela, Director Administrativo del Banco Internacional del Norte.
Mención aparte merece el equipazo y acérrimo rival del Bisa A, que se denominaba Banrural Matriz y que entre sus filas contaba con reconocidos elementos como: Ricardo “Nonis” Nevárez (Pericos de Puebla en 1968), Pedro Martínez, Mario Montaño, Rafael “El Cacaro” Muñoz, Rubén “El Zurdo” Flores, José Luis Hernández Jr, Héctor “Tito” Delgado, y Ricardo “El Chivo” Dávila, entre otros, todos ellos comandados por el experimentado manager José Luis Hernández Sr. Entre los pitchers destacados de aquella Liga Bancaria, se recuerda entre otros a: Ernesto Lesprón, Benedicto Nava, Elías Hernández, Ramón González, Domingo Ruiz, Gustavo “El Marro” Loera, José Antonio “El Charrito” López, Manuel Urbina, Alberto “Calilla” Reyna, Luis Reyes, y Manuel “Chihuahua” Contreras. A nivel regional, el pitcheo lo encabezaba un pequeño grupo que incluía principalmente a: Arnulfo “Chamaco” Del Real, Francisco “La Gallina” Rodríguez, Edgardo “Perico” Rojas, Carlos Valle, Arnulfo Rojas, José Luis Acosta, Juan Antonio Elizalde, y Pepe Ortiz, entre otros.
Pancho Saucedo conformó su equipo de la Liga Bancaria con puros novatos en su totalidad y después de recibir algunas palizas, dada la diferencia en el nivel y calidad de los jugadores de uno y otro equipo, aunado a que Saucedo apenas iniciaba su etapa de práctica y aprendizaje para desempeñarse como lanzador, trajo como consecuencia que su equipo terminara en los últimos lugares del torneo, pero esto de ninguna manera disminuyó el entusiasmo de Panchito por seguir aprendiendo y poniendo en práctica los diferentes lanzamientos que lo llevarían a convertirse en toda una estrella del softbol de nuestro país.
Fue en un partido de exhibición celebrado en Torreón, Coah., donde Saucedo presenció por vez primera al entonces destacado lanzador duranguense Manuel Victorino, quien en ese entonces estaba convertido en un pitcher de gran velocidad y con un aceptable repertorio de lanzamientos que lo ubicaban como el mejor serpentinero a nivel estatal, y al que “Supermán” le solicitó humildemente algún consejo para perfeccionar algunos pitcheos, petición que al parecer no fue del agrado de Victorino, quien se limitó a darle algunas rápidas explicaciones, tal vez con la intención de que el gomezpalatino no lograra captar la “enseñanza”. Muy lejos estaba Victorino de imaginar que unos meses después el “Supermán” lo superaría en un trepidante duelo de pitcheo, cuando el poderoso equipo de Industrial Kimball trajo al de Durango capital ex profeso para tratar de vencer al equipo del Banco Internacional con su lanzador estelar Francisco Saucedo, convertido ya en una estrella del pitcheo, y estando en juego el campeonato de la Liga Regional de Softbol.
Apoyado principalmente por las conferencias impartidas por el estelar del pitcheo nacional Roberto “Tito” Florencia, en las cuales explicaba la mecáncia para que un lanzador pudiera explotar al máximo cada una de sus pitcheadas, y escuchando los consejos de algunos de los “caballos” de aquella época, Panchito fue poniendo en práctica todo lo asimilado y fue cosechando triunfos al por mayor en todas y cada una de las Ligas de nuestra Comarca Lagunera, de los cuales son testigos todos y cada uno de los softbolistas que enfrentaron al “Supermán” principalmente en la década de los 80,s.
El buen amigo Elías Jaime, que en los años 70,s era ampayer, anotador, compilador, y además escribía las notas de los juegos de softbol para los diversos periódicos de la localidad, fue quien “bautizó” a Panchito con el mote de “Supermán, cuando en un partido de la Liga Bancaria, Saucedo se impuso por marcador de 1 por 0 al fuerte equipo de ANAGSA y su pitcher estelar Ramón González, que en ese tiempo era tal vez el mejor lanzador de la Liga. Lo extraordinario del caso es que la única carrera del encuentro fue producto de un cuadrangular !conectado por Saucedo!, a quien después del partido Elías Jaime le comentó: “ eres el pitcher ganador, eres el manager del equipo vencedor, y eres el productor de la única carrera, serás “Supermán”. y de ahí nació el sobrenombre con el que hasta la fecha es identificado el brillante lanzador gomezpalatino. (Continuará...)