Verdaderamente sensacional, está resultando la serie final, oficialmente llamada “Serie México”, por el campeonato de la Liga de Mexicana del Pacífico (LMP) correspondiente a la temporada 2024-25, que se disputan los Charros de Jalisco y los Tomateros de Culiacán. Literalmente, esta serie final ha estado fuera de serie. Como suele ser en este tipo de enfrentamientos definitorios (aunque no siempre ha sido así en la LMP) éstos son a ganar cuatro de siete juegos posibles.
Como dato significativo, cabe señalar que en los últimos diez años, desde que los Charros de Jalisco regresaron a esta Liga, luego de una larguísima ausencia de seis décadas, se han enfrentado ya en tres ocasiones con los Tomateros de Culiacán por el campeonato: en los años 2015, 2022 y ahora en 2025.
Ningún otro par de equipos se han disputado el título de la LMP en un periodo de diez o menos años. Por eso, algunos opinan que esta rivalidad por el banderín entre Charros y Tomateros se puede considerar ya un “clásico” del beisbol invernal mexicano.
Por cierto, en 2015 la serie la ganaron los de Culiacán en cinco juegos y la de 2022 los de Jalisco en siete encuentros. Esta de 2025, a más tardar el miércoles 29 sabremos qué equipo ganará el campeonato y obtenido el derecho a representar a México en la Serie del Caribe de este año, que arranca dos días después, el viernes 31 de enero en Mexicali, B.C.
Como dato histórico, vale la pena mencionar que en las tres temporadas que van de 1952-53 a 1954-55 de la entonces llamada Liga de la Costa del Pacífico participó Jalisco, la primera y la última campaña con el mote de “Medias Azules” y la intermedia con el apelativo de “Charros”.
Al momento de escribir estas líneas, Jalisco lleva ganados tres juegos y Culiacán dos. Los cinco encuentros han sido tremendos choques de pelota, muy parejos, con grandes duelos de pitcheo, lances espectaculares de uno y otro conjunto, con momentos de altísima tensión y la adrenalina a tope, que ha electrizado a los aficionados que han llenado hasta las lámparas los estadios de ambas plazas.
Qué tan pareja no estará la serie que los resultados de los cinco juegos hasta ahora realizados han terminado con diferencia de apenas una carrera. Y que los Charros en total han anotado 16 carreras y los Tomateros 15. Más equilibrada la competencia, imposible.
Reflejo además de que ambas escuadras son dirigidas por quienes se considera son los mejores managers de la LMP en los últimos once años: Roberto “Chapo” Vizcarra de los Tomateros y Benjamín Gil de los Charros. Que además están muy parejos en cuanto a campeonatos ganados por uno y otro, pues Vizcarra lleva cuatro y Benjamín Gil cinco.
Han sido numerosos los momentos y los lances espectaculares que ha tenido la serie. Para recordarse durante muchos años el segundo juego, ganado por Jalisco 2 carreras a 1 en catorce innings como visitante, gracias a una sensacional atrapada de Julián Ornelas en el jardín izquierdo en la parte baja de la decimotercera entrada, que evitó timbrara la carrera que habría dejado a los Charros regados en el terreno.
Y me parece que también memorable el descomunal cuadrangular conectado por todo el jardín izquierdo en el noveno episodio del juego 3 por el colombiano Reinaldo Rodríguez, para lograr que los Charros empataran el encuentro a 5 carreras y luego anotaron la del triunfo, viniendo de atrás en un encuentro que hasta el inicio de la parte baja del octavo inning perdía Jalico 5 a 0.
En fin, gane el equipo que gane, será ésta una serie que la afición habrá de recordar siempre.
