
A Pedro Verdez, voz y bajo de la agrupación, a Omar Sainz, voz y guitarra, y al baterista Cesar Bernal, les quedó claro que el rock y el regional mexicano no tenían por qué vivir separados (CORTESÍA)
Hoy 25 de abril el escenario de Vértigo en Torreón vibrará con una de las propuestas más sui géneris del rock mexicano actual: Nunca Jamás, la banda que convirtió la fiesta en género musical y al rancho en sinónimo de distorsión.
Si pensabas que el regional mexicano y el rock no podían convivir en armonía, esta banda sonorense se permitió explorar justo en esa discordancia para emerger dentro de un universo sonoro propio.
Fue así que a Pedro Verdez, voz y bajo de la agrupación, a Omar Sainz, voz y guitarra, y al baterista Cesar Bernal, les quedó claro que el rock y el regional mexicano no tenían por qué vivir separados.
Desde hace casi dos décadas, el grupo nacido en Ciudad Obregón, Sonora, viene cincelando una propuesta única que hoy llaman con orgullo "rock agropecuario".
Este mes la banda regresará a Torreón como parte de su gira "La Orden Agroesotérica", una celebración conceptual y sonora que promete poner a vibrar a los laguneros.
"Vamos a andar con toda la onda gacha allá por Torreón, vamos a estar en el Vértigo para que se jalen los pelos ahí la raza. Toda la información está en nuestra página", invitó Pedro en entrevista.
Cabe mencionar que se trata de la segunda ocasión que la banda visita La Laguna. "La raza nos pidió que volviéramos. Y ya teníamos rato queriendo hacerlo. Va a estar bueno, se va a poner guapo el cotorreo".
LA ORDEN AGROESOTÉRICA
Cada año, Nunca Jamás construye un concepto diferente para su gira. En 2023 fueron "Los Agrogodínez"; antes, "Agropatas Anónimos", un grupo de autoayuda ficticio para quienes vivían entre el prejuicio de amar el rock y el regional por igual. En el 2021, incluso crearon "La Iglesia del Rock Agropecuario".
Este 2024, el concepto es La Orden Agroesotérica, una especie de culto humorístico y espiritual en el que el objetivo es "agropecuarizar" a la gente.
"Queremos que se liberen de esos paradigmas. Que entiendan que nadie les puede decir cómo ser ni qué escuchar. Queremos que se hagan 'agronósticos'", bromeó el bajista.
EL ORIGEN DEL AGROCOTORREO
La historia de Nunca Jamás comenzó formalmente en 2007, aunque la gestación de su identidad arrancó desde 2005.
Fue en esos primeros años donde se sembró la semilla de lo que sería su sello distintivo: una fusión entre el rock y los sonidos más populares del norte del país.
"Dentro de la borrachera surgió todo este concepto de rock agropecuario. Estábamos en las fiestas donde primero ponían rolas de rock, pero ya en la madrugada salían las norteñas, la banda, la cumbia. Dijimos: ¿por qué no pueden convivir estos géneros juntos?", recordó Pedro.
La banda dio sus primeros pasos en Ciudad Obregón, y para 2008 ya estaban en la Ciudad de México grabando sus siguientes discos. Sin embargo, conforme los integrantes comenzaron a volver al norte, también cambió la forma en que Nunca Jamás entendía su carrera.
"Antes trabajábamos desde la Ciudad de México hacia afuera. Ahora lo hacemos al revés, desde Ciudad Obregón hacia el país. Curiosamente, empezó a funcionar mejor", afirmó el bajista.
Aunque el germen del concepto estaba presente desde el inicio, no fue sino hasta el cuarto disco que lograron consolidarlo con la ayuda de productores como Esteban Valle, experto en música regional mexicana. La clave, dice Pedro, fue lograr una fusión auténtica, sin forzar ninguno de los dos géneros.
"No queríamos sonar como rockeros pretendiendo tocar banda, ni viceversa. Ahora cada elemento respira donde debe, sin interferirse. Logramos ese equilibrio que se siente natural", explicó.
Inspirados por propuestas como Caifanes, Genitallica o Nortec, Nunca Jamás quiso ir más allá de la fusión ocasional de estilos. En lugar de tener sólo una canción mezclada, ellos crearon un proyecto completo, con estética, identidad y discurso.
"Nos tiramos de panza a hacer un concepto general. No nos da miedo andar mezclando géneros. Hicimos mariachi con Christian Nodal, hip hop con Charles Ans… de eso pedimos nuestras limosnas, de jugar con los elementos, de volvernos locos".
Por último Pedro realizó una invitación a la audiencia lagunera que busque una experiencia sonora distinta. "Que se echen la vuelta, que no les dé miedo el rock agropecuario. Si andan buscando una opción distinta cáiganle, puede que se sorprendan".
Con su más reciente sencillo Hoy quiero llorar, colaboración con la cantautora sonorense Ms. Ambar, la banda sigue demostrando su voluntad por seguir mezclando estilos y emociones.
Pedro lo resume así: "Tratamos de no aburrirnos, de jugar, de buscar otras melodías, de experimentar…".