Obispos manifiestan su indignación por el asesinato de ocho jóvenes de la Pastoral Juvenil de Salamanca
Obispos de México manifestaron su indignación sobre los hechos registrados el pasado 16 de marzo en San José de Mendoza, en Salamanca Guanajuato, que cobrara la vida de ocho jóvenes, que formaban parte de la Pastoral Juvenil de la parroquia del lugar, víctimas de una delincuencia “que presume impunidad”.
“Nos sentimos conmovidos por el dolor que esta tragedia ha provocado a sus familiares y amigos. Por estos ocho jóvenes y muchos más que han muerto a manos de la delincuencia organizada, elevamos al Señor nuestra oración para que les conceda el eterno descanso a ellos y el consuelo a sus familiares y amigos”, reza el documento que emitió la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) que preside el obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro.
En el documento señalan que el hecho los hace reflexionar sobre la violencia que azota a la nación y que se ha vuelto “un cáncer para nuestra sociedad; la delincuencia presume impunidad, manifiesta el desprecio por la vida y hace imperar la inseguridad en nuestros espacios vitales comunitarios; esta realidad hiere el corazón de todos los mexicanos, nadie puede sentirse fuera de ella. Es momento de unirnos y asumir cada uno nuestro compromiso por la paz en nuestro país”.
En su llamado dicen basta a los intereses personales y partidistas, y llaman a la unión para una construcción del bien común. “Los obispos de México hacemos un llamado a todos los ciudadanos, a las autoridades en sus tres niveles: municipal, estatal y federal; a los jueces, magistrados y ministros; a los legisladores, a la sociedad civil organizada, a los empresarios, comunicadores y a todas las comunidades que persiguen la construcción del bien común, para asumir cada uno nuestra responsabilidad con valentía y compromiso por México. Basta ya de intereses personales o partidistas, formemos un frente común, vivamos la solidaridad que tantas veces nos ha caracterizado ante las tragedias que enfrentamos, y combatamos la delincuencia y la falta de justicia que hace sangrar nuestra patria y trunca el sueño de miles de nuestros jóvenes”.
Del hecho
Como se informó, la agresión ocurrió la noche del domingo 16 de marzo, cuando un grupo de sujetos armados irrumpió en la zona principal del pueblo, disparando indiscriminadamente contra quienes se encontraban en su camino.
El atentado dejó huellas en los hogares, negocios y en los muros de la parroquia local, donde las víctimas formaban parte de la Pastoral Juvenil Testigos aseguraron que los agresores escaparon en camionetas, sin que hasta ahora se hayan reportado detenidos.
