
En 2024 había 280 concesiones en operación en el municipio de Torreón.
Rutas del servicio público de transporte han dejado de ser atractivas para los usuarios, por lo que se busca replantearlas, para que reduzcan sus tiempos, mejoren el confort, faciliten el sistema de cobro, garanticen la frecuencia, de manera que esto incida en la seguridad vial y en el medio ambiente, al tener menos vehículos en las calles.
En reunión del Consejo de Seguridad y Desarrollo (Consede), el director de Vialidad y Movilidad Urbana de Torreón, Luis Alberto Morales Cortés, presentó el cronograma para la reestructuración del Transporte, un plan de 90 días de los cuáles ya transcurrieron 30, para el análisis y diagnóstico de la oferta, demanda y marco legal.
Refirió que se realizan encuestas origen-destino para tener un diagnóstico. Como parte del análisis, explicó que ha habido cambios drásticos en el transporte antes y después de la pandemia, pues en 2019 operaban más de 580 concesiones en Torreón, pero a partir de marzo de 2020 la situación fue muy conflictiva y la movilidad se redujo a un 30 por ciento, por lo que los transportistas vieron mermado su sistema de negocio, de manera que cuando alguna unidad se detenía se volvía refaccionaria de otras. En la nueva normalidad, en 2022, había 350 concesiones, es decir, hubo una disminución de casi un 25% de manera significativa.
"En ese inter, el ciudadano dejó de tomar como una opción el transporte público de pasajeros y empezó a buscar otras alternativas, entre ellas los denominados cinqueros y también el fenómeno del crecimiento de las motocicletas, en el que personas adultas que nunca se imaginaron andar en moto, la vieron como una opción de movilidad", comentó.
En 2024 había 280 concesiones en operación. En 4 años se redujo a la mitad el número de unidades en operación, afectando principalmente algunas rutas que tenían una frecuencia muy amplia, de 45 minutos, 1 hora o más. En este sentido, explicó que se busca reducir los tiempos, mejorar el confort, facilitar el sistema de cobro, garantizar la frecuencia, incidir en la seguridad vial y también en la mejora del medio ambiente: "es claro que cuando no hay un transporte de pasajeros adecuado, hay más vehículos en la calle".
El director dijo que se actualiza la necesidad de los usuarios, considerando que ahorita no es una alternativa, por eso se tiene que replantear, pues no se están usando ciertas rutas, principalmente del norte, algunas del oriente y del sur.
"Hay rutas que prácticamente atraviesan toda la ciudad, desde las colonias del norte hacia la zona centro, que tienen tiempo en abandono", expresó.
A la par, subrayó que se instaló el Fideicomiso del Transporte Público, una acción que no se logró en la administración anterior, ya que hubo una serie de sesiones en las que no se presentaron los concesionarios. En esta ocasión, dijo que hubo una respuesta positiva de los concesionarios, asistieron, estuvieron presentes, se votó, se hicieron designaciones y está de nueva cuenta este esquema.
"A los integrantes de este esquema se les va a invitar a participar en este proyecto. Si están las condiciones dadas, excelente, porque vamos apelar a su experiencia, pero si no, y vamos a entramparnos en 'vencidas legales', así le llamo yo, de una acción, yo me amparo, yo promuevo y todas esas cosas que no nos van a llevar a ningún lado más que a perder tiempo, lo vamos a sacar del proyecto", comentó.
Morales Cortés dijo que conocen la afectación que ha tenido su sistema de negocio, que se fue deteriorando, pero también se necesita disposición. En este sentido, dijo que ellos requieren de una tarifa y se tiene que revisar con los vehículos nuevos para que se pueda tener esa dignificación del transporte público de pasajeros.
"Tenemos que ver cómo vamos incrementando otra vez hasta llegar al tope máximo que permita ser una opción el transporte público a los ciudadanos", expuso.