Sector automotriz de Norteamérica teme que aranceles de Donald Trump interrumpan producción
El sector del automóvil norteamericano teme que los aranceles del 25 % impuestos por Donald Trump, que entrarán en vigor el martes, pueden colapsar la producción de vehículos en semanas.
Brian Kingston, presidente de la Asociación Canadiense de Fabricantes de Vehículos (CVMA en inglés), formada por General Motors, Ford y Stellantis, declaró a la radiotelevisión pública canadiense CBC que el sector "se enfrenta a posibles parones en Norteamérica, no solo en Canadá y México, sino también en Estados Unidos".
Kingston añadió que los aranceles del presidente estadounidense supondrán la destrucción de empleos y el aumento "en miles de dólares" de los precios de los automóviles para los consumidores estadounidenses.
En términos similares se expresó el presidente de la Asociación de Fabricantes de Partes del Automóvil (APMA en inglés), Flavio Volpe, cuya organización agrupa a decenas de fabricantes de componentes en Canadá, que prevé que "la producción de partes y vehículos en Norteamérica parará" en pocos días.
Linda Hasenfratz, presidenta de uno de los más importantes integrantes de APMA, el fabricante Linamar, señaló al periódico canadiense The Globe and Mail que la producción norteamericana cesará en una semana.
"Va a crear un coste exorbitante y nuestros clientes no pueden absorberlo. Los consumidores, por supuesto, no van a pagarlo, así que la demanda se desintegrará", afirmó la empresaria.
Linamar produce transmisiones y componentes de motores. Tiene 5 plantas en México, 17 en Estados Unidos y 30 en Canadá.
El sector del automóvil en EE.UU. y Canadá está profundamente integrado desde la década de 1950 y algunas partes cruzan la frontera entre los dos países hasta ocho veces; lo mismo sucede entre EE.UU. y México.
En Estados Unidos, MichAuto (la asociación de productores del sector en el estado de Michigan) criticó los aranceles y advirtió del "daño colateral" que provocarán.
"Nuestras economías están unidas de forma íntima", dijo su director ejecutivo, Glenn Stevens, en un comunicado.
"MichAuto y sus integrantes están preocupados por el daño colateral que sufrirá el sector manufacturero, el impacto que tendrá en los empleos de los habitantes de Michigan y el hecho de que los consumidores sentirán el aumento del coste", añadió.
Por ejemplo, el 40 % de la producción norteamericana de General Motors (GM) se efectúa en Canadá y México. Sólo en este último país, GM produce unos 845.000 vehículos que luego son exportados en su mayoría a EE.UU. y Canadá.
Ford produce más de 350.000 automóviles en México que luego son exportados a EE.UU., y la japonesa Nissan 326.000.